Columna de Montserrat Arrieta

¿Qué es lo que un gamer quiere?

¿No les pasa que cuando juegan algún título esperan no solo divertirse, sino llenar algún vacío de emociones?

Con tantos títulos disponibles de tan amplios géneros, parecería difícil saber lo que realmente busca un gamer, y dejando de lado el lag que hoy en día es un problema muy recurrente y que sería una de las mayores peticiones de la mayoría.

Lo que buscamos es un juego que ofrezca una buena historia, que nos enganche y haga sentir más allá de un simple juego, que te ofrezca la posibilidad de despejar tu mente, sentirte parte de ese mundo, dentro del videojuego, tener más retos, saberte el rey en ese mundo.

Si bien las consolas, computadoras y demás dispositivos son clave porque nos permiten tener una mejor experiencia, definitivamente lo que más llama nuestra atención son los títulos que cada franquicia ofrezca.

Yo busco una historia que me haga sentir conectada con el juego, las historias en general que nos muestran hoy en día los juegos son bastante buenas, incluso mejor que mucha películas.

Dejando de lado a los modos de multijugador, a pesar de que muchos digan que los juegos con historia ya no venden, tenemos los claros ejemplos de Playstation con God Of War o con The Last Of Us, títulos que nos emocionan cada que los jugamos.

Si dejamos una industria de videojuegos solo con títulos y sin historias ¿a dónde iríamos a dar? Todo es parte de un equilibrio, hay videojuegos con historias a la par de los que solo se basan en lo competitive.

Por otra parte tenemos los DLC y demás, que en cierta medida enriquecen no solo los bolsillos de las compañías sino también las historias, pero aclaro que deben de llevar una coherencia y a sentir más de la historia. Es por eso que hay títulos que considero no lo necesitan, se vuelven perfectos con solo su historia.
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