Asteroides y meteoritos: ¿por qué su existencia causa tanto miedo?
Ambos causan temor, especialmente ante la posibilidad de que impacten con la Tierra.
Un asteroide se trata de un objeto rocoso de diferentes tamaños que orbita alrededor del sol, al igual que los planetas. La mayoría de los asteroides que habitan nuestro Sistema Solar se sitúan en el cinturón de asteroides, una región localizada entre las órbitas de Marte y Júpiter. Otros forman parte de la trayectoria orbital de los planetas, es decir se desplazan con ellos alrededor del Sol. Fueron denominados así por el astrónomo británico John Herschel (1738-1822).
Los asteroides son los restos de lo que sobró cuando el Sistema Solar se formó resultado de una gran nube de polvos y gases; podemos decir que son elementos que no alcanzaron a adherirse a los planetas y, por lo tanto, quedaron a la deriva.
Los científicos monitorean permanentemente los movimientos de los asteroides. Incluso, la NASA ha enviado diversas naves hasta estos objetos para estudiarlos y traer muestras de ellos a la Tierra, ya que en ellos se encuentran alojadas muchas respuestas a las interrogantes en torno al nacimiento del Sistema Solar.
¿Cómo es un asteroide?
No hay un solo asteroide igual. Tienen formas dentadas e irregulares. Además se componen de distintos tipos de rocas y algunos tienen arcillas o metales, como el níquel y el hierro. Igualmente su tamaño varía: los hay diminutos como del tamaño de una uva hasta otros que alcanzan cientos de kilómetros de diámetro.
¿Qué diferencia hay entre los asteroides y los meteoritos?
Los meteoritos son pequeños fragmentos que se desprenden de los asteroides y vuelan a través de la atmósfera de la Tierra hasta hacer contacto con la superficie. Al igual que los asteroides, los meteoritos varían en forma y tamaño. Por lo regular, los meteoritos se consumen cuando hacen contacto con la atmósfera.
¿Por qué nos dan tanto miedo los asteroides y meteoritos?
Si el cuerpo del meteorito es demasiado grande, puede no llegar a consumirse cuando viaja por la atmósfera. Eso implica que al impactar con la Tierra puede provocar distintos estragos, en especial, cambios climáticos y orográficos en el planeta, como ocurrió con los dinosaurios hace millones de años. Un meteorito de 10 km de diámetro, aproximadamente, impactó con la Tierra en la Península de Yucatán, causando la extinción de estos reptiles en el periodo Cretácico.
Debido a que estos objetos se desplazan de manera permanente por el Sistema Solar, su trayectoria ha llegado a pasar tan cerca de la Tierra que provoca un tumulto de rumores, miedos y noticias en torno a un posible choque con nuestro planeta. De ahí el miedo que nos causa el nombre asteroide y el de sus compañeros los meteoritos. En la actualidad se considera que hay unos 800 Asteroides Potencialmente Peligrosos (PHA, Potentially Hazardous Asteroid, sus siglas en inglés) que pueden causar catástrofes en la Tierra.