Los peligros de dejar que tu mascota lama tu rostro

Conoce las razones por las que dejar que tu mascota lama tu cara podría no resultar una buena idea.

La lengua de un perro posee millones de bacterias que pueden poner en riesgo tu salud. (Foot: Irish Times)

Sabemos que el amor que sientes por tu perro se traduce en los mejores cuidados, caricias, juegos, una buena alimentación y… dejar que su lengua se pasee por tu rostro en repetidas ocasiones, lo cual sin duda es una muestra de que tú y tu mascota tienen una excelente relación. Pero, ¿sabías que dejar que tu perro lama tu rostro también está asociado a ciertos malestares debido al intercambio de bacterias que existe en ese gesto? ¿Qué pasa cuando dejas que tu perro chupe tu cara, boca o manos?

Desde inflamación crónica en el estómago y dolor abdominal hasta diarrea, fiebre e incluso afectaciones en hígado y pulmones son algunos de los riesgos que pueden presentarse a mediano o largo plazo cuando dejas que tu perro te ‘bese’ de manera crónica, especialmente cuando estuvo enfermo recientemente y tuvo vómito, diarrea o dolor abdominal.

Leni K. Kaplan, doctor del Colegio de Medicina Veterinaria de la Universidad de Cornell (Estados Unidos) afirma que el contacto de la lengua de un perro con tu boca, nariz u ojos puede provocar una infección debido al gran número de bacterias que se alojan en esta parte de los perros.


Considera que los perros suelen lamer heces fecales y otros elementos del ambiente que se convierten en un peligro para los humanos. En el caso de los gatos, éstos no suelen hacer lo mismo, pero sí se ha descubierto que pueden llevar materia fecal alojada entre sus uñas, lo cual también se convierte en un foco de infección en caso de existir un rasguño de su parte.

Bacterias como Campylobacter jejuni, Helicobacter heilmannii (H.H.) y pylori (H.P.) o Toxocara son algunas de las más comunes que se transmiten de la lengua de los perros hasta el organismo humano. Hay que destacar que estas bacterias no solo se transmiten por esta vía, sino también por una higiene inadecuada al comer.

Para evitar esta transmisión de bacterias es aconsejable que los dueños se hagan cargo de que sus mascotas tengan las vacunas adecuadas, además de vivir en un sitio con todas las garantías de higiene. Igualmente importante es lavarse las manos después de tener contacto con los perros. Disfruta en todo momento a tu mascota, pero siempre cuidando que la higiene sea total.

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