¡Desgarrador! Imelda Tuñón narra cómo fueron los últimos momentos con vida de Julián Figueroa

Una noticia que enmudeció al mundo del espectáculo fue la muerte, a los 27 años, de Julian Figueroa, hijo de Joan Sebastian y Maribel Guardia. Su esposa, Imelda Garza Tuñón, decidió romper el silenció y contó los desgarradores momentos en los que encontró sin vida a su pareja.

Así fueron las últimas horas de Julián Figueroa

En entrevista con el programa “De Primera Mano”, Imelda contó que Julián tenía varios días sin dormir y que se encontraba un tanto deprimido porque ya había sido el cumpleaños de su papá, razón por la cual el domingo se fue a descansar un rato a la sala de videojuegos.

“Estábamos juntos, en la tarde se sentía muy mal porque no había dormido en tres días, estaba muy deprimido por lo de su papá… como a las 6 de la tarde me dijo: me voy a bajar al cuarto de los videojuegos y me voy a tratar de dormir un ratito”, comenzó.

Después detalló que fue a visitarlo al cuarto, pero al no recibir respuesta entró para observarlo, ahí se percató que algo estaba pasando al tocarlo y verlo, por lo que decidió llamarle al esposo de Maribel y, posteriormente, a los servicios de emergencia.

"Le fui a tocar la puerta, no me contestó, abrí y vi como que estaba dormido, porque estaba en posición de dormido, las piernas incluso las tenía cruzadas como él dormía, no había nada diferente. Lo toqué de la pierna para moverlo y para tratar de despertarlo y sentí que la pierna estaba como muy fría, entonces prendí la luz y vi que tenía la boca morada".

Cuando llegaron los paramédicos le informaron que Julián ya no contaba con signos vitales tras sufrir un infarto, pero Imelda comentó que no cree que haya sufrido porque se encontraba en la posición en la cual siempre duerme.

“Lo único que me da paz, es que cuando lo encontré estaba en posición de dormir, no tenía ninguna señal de que hubiera sufrido y yo quiero pensar que se durmió soñando con su papá y que ahí se fue con él”,

Esposa afrontó muerte de Julián Figueroa sola

Debido a que Maribel se encontraba en una función de teatro y, posteriormente su esposo se la llevó a cenar para darle la terrible noticia, Imelda mencionó que tuvo que lidiar ella sola con la policía y las lágrimas pero, sobre todo, hacerse fuerte para que su pequeño hijo no notara qué estaba pasando y pudiera irse a dormir de manera tranquila.

"Yo enfrenté las primeras horas sola con la policía y los paramédicos. Me limpiaba las lágrimas para subir y que el niño no me viera así, pretender que todo estaba bien porque tenía que dormirlo, y no le podría decir algo así en el momento, no quería que viera a su papá así", finalizó.