¿Marte tuvo vida? Nuevos descubrimientos dicen que su clima pudo permitirlo
Si bien Marte actualmente es conocido por su clima árido y desértico, evidencias apuntan a que en el pasado albergaba ríos y lagos que ahora han desaparecido.
A través de la exploración del robot Curiosity en la superficie marciana, los científicos han desenterrado nuevas pistas sobre el pasado de Marte, sugiriendo que el planeta rojo pudo haber tenido un clima cíclico y condiciones propicias para el desarrollo de la vida hace miles de millones de años.
Si bien Marte actualmente es conocido por su clima árido y desértico, evidencias apuntan a que en el pasado albergaba ríos y lagos que ahora han desaparecido. A diferencia de la Tierra, Marte carece de actividad tectónica significativa, lo que ha permitido que depósitos antiguos se conserven de manera excepcional en su superficie.
Curiosity es vital para la investigación
La labor de Curiosity ha sido fundamental en este descubrimiento. Desde 2012, este robot de la NASA ha explorado el cráter Gale y su imponente montaña compuesta por capas sedimentarias. Inicialmente, los científicos sabían que estaban estudiando antiguos depósitos de lagos y ríos, pero no tenían certeza del tipo de clima que estos indicios sugerían.
William Rapin, investigador del CNRS, y su equipo han llegado a la conclusión de que Marte podría haber tenido un pasado de ciclos climáticos. Según sus teorías, el planeta pudo haber experimentado una erupción volcánica que repentinamente calentó la atmósfera, dando lugar a la formación de agua líquida en su superficie.
El análisis de depósitos de sal con formas hexagonales en la montaña de Curiosity ha sido fundamental en esta revelación. Estos depósitos datan de hace 3.800 a 3.600 millones de años y presentan grietas características del secado del lodo. Al rehidratarse, estas grietas se "curan" y, con ciclos repetidos, pueden formar patrones hexagonales, similares a los observados en cuencas terrestres secas estacionalmente.
Este hallazgo marca "la primera prueba tangible de que Marte tenía un clima cíclico", afirma Rapin. Estas estaciones secas y húmedas, que se sucedieron hace miles de millones de años, pudieron haber brindado un período lo suficientemente largo para el desarrollo de la vida, similar a lo que ocurrió en la Tierra.
El camino de lo inerte a lo vivo en Marte
Estas condiciones climáticas habrían sido cruciales para que la materia orgánica evolucionara de lo inerte a lo vivo. Los científicos ya habían identificado moléculas orgánicas simples en Marte, y la existencia de ciclos climáticos proporciona la ventana de oportunidad necesaria para la formación de moléculas más complejas y esenciales para la vida.
El descubrimiento no solo arroja luz sobre el pasado de Marte, sino que también alimenta la posibilidad de que la vida haya podido emerger en un planeta con un entorno propicio. A medida que la exploración espacial continúa, la investigación en Marte promete seguir revelando secretos sobre nuestro sistema solar y el potencial de vida más allá de nuestro propio planeta.