Hombre en Australia huye de la cuarentena de COVID con escape 'a lo Rapunzel'
Australia ha aplicado medidas estrictas por la variante Delta del coronavirus, pero un ciudadano se fugó de un cuarto piso usando sábanas amarradas.
En el primer mundo también hay inadaptados que no saben seguir las reglas y protocolos contra el coronavirus, pues en Australia un hombre de 39 años supuestamente usó una cuerda hecha con sábanas para bajarse de una habitación de hotel en el cuarto piso y huir de la cuarentena obligatoria, dijo la policía.
El individuo -cuya identidad no fue revelada- llegó el lunes por la tarde a Australia Occidental desde Brisbane -ciudad elegida este miércoles como sede de los Juegos Olímpicos del 2032-, pero no cumplió con los requisitos de exención necesarios para ingresar al estado, según un comunicado de la Fuerza de Policía de Australia Occidental.
La indicación de las autoridades al hombre era que debía salir de Australia Occidental en 48 horas. Para garantizar que cumpliera con las normas se le hospedó en el cuarto piso de un hotel, pero los reportes indican que se fugó a medianoche del martes, siendo capturado horas más tarde bajo el agravio de no cumplir con una instrucción y proporcionar información falsa.
COVID en Australia; quejas por vacunación
El país más grande de Oceanía está luchando por contener un brote local de la variante Delta que comenzó el 16 de junio con un conductor de limusina que transportaba a la tripulación de un vuelo internacional. Ahora se informan cientos de casos en Nueva Gales del Sur cada semana, con un puñado de casos en los estados vecinos de Victoria y Australia del Sur.
Más de la mitad de los 26 millones de habitantes de Australia están encerrados en esos tres estados, y se han impuesto restricciones en otros lugares para detener la propagación.
Las fronteras australianas han estado cerradas desde el año pasado a casi todos los no residentes e incluso aquellos a los que se les permite ingresar al país deben pagar miles de dólares para estar en cuarentena durante dos semanas en un hotel.
Una queja es el ritmo de vacunación porque solo el 11% de la población está completamente vacunada y los menores de 40 años aún no han sido programados para recibir fármacos de Pfizer, Moderna o AstraZeneca.