La importancia de una buena hidratación para un atleta olímpico

Los riesgos de exponerse a una deshidratación para un atleta son altos, pero hay métodos para disminuir los riesgos.

¿Por qué es tan importante la hidratación para un atleta olímpico? (Especial)

Durante unos Juegos Olímpicos es común ver a un atleta 'bañado' en sudor, reflejando el esfuerzo y la entrega que está ejerciendo durante una competencia. Sin embargo, cada gota que está emanando de su cuerpo viene precedida de una hidratación que le está permitiendo no sucumbir ante el esfuerzo y a un sobrecalentamiento por el que está pasando su cuerpo.

Y no es de sorprender ver estas postales cuando el cuerpo del ser humano está compuesto en su mayoría por agua, sin embargo, pocas veces nos imaginamos todo lo que hay detrás de la preparación de un atleta olímpico y entras ella está la importancia de tener una adecuada hidratación.

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¿Por qué es importante tener una buena hidratación?

Las cantidades de agua que hay en el ser humano se mantienen al límite, debido a que ésta se encuentra en circulación constante, es decir, ingresa gracias a los líquidos ingeridos, los alimentos y el agua producida por el metabolismo general del cuerpo, pero a su vez son expulsados por medio de la sudoración, la orina y el vapor de agua eliminado por los pulmones.

Lo importante de este tema es que de acuerdo al Instituto de Formación e Investigación en Ciencias de la Educación y el Deporte, la mayor parte de la cantidad de agua se almacena en los músculos, por lo que una vez que se ponen a trabajar por medio del deporte comienza un proceso que ayuda a liberación de la sudoración para evitar un sobrecalentamiento corporal.

"Aproximadamente el 80% de la energía producida para la contracción muscular se libera en forma de calor. Nuestro organismo debe eliminar esa gran cantidad de calor para que no se produzca un aumento de la temperatura corporal, que tendría consecuencias muy negativas para la salud, por lo que debe recurrir al mecanismo de la sudoración, que al mismo tiempo que 'enfría' el cuerpo, provoca una importante pérdida de líquidos. La termorregulación y el equilibrio de líquidos son factores fundamentales en el rendimiento deportivo".

Los riesgo de la deshidratación

Los atletas que se exigen en competencias de larga duración y resistencia, como puede ser un maratón, suelen exponerse de forma importante a una deshidratación, más si se combina con un clima poco favorable, como puede ser la humedad o las altas temperaturas.

La pérdida de líquidos por medio del sudor y una mala hidratación puede conllevar a un riesgo de salud en el atleta, aunado a que su rendimiento se verá afectado porque no podrá realizar esfuerzos importantes.

La falta de líquidos en el cuerpo se suele manifestar por medio del deseo de beber agua, pero hidratarse y hacer desaparecer la sed, no es garantía de que el cuerpo haya recuperado su estado de equilibrio. Es por ello que los expertos aplican pautas de hidratación de acuerdo al atleta y la disciplina que se esté ejerciendo para evitar poner en riesgo su vida.

¿Los electrolitos ayudan?

Luego de que un atleta sufre un desgaste físico importante, los especialistas recomiendan tomar bebidas que contengan electrolitos, debido a que éstos ayudan a regular el equilibrio de los líquidos en el organismo, ya que están compuestos de sodio, cloro y potasio.

La ausencia de electrolitos en el cuerpo de un atleta pueden ocasionar calambres musculares y debilidad; la forma en que se expulsan son por medio de la sudoración. Sin embargo, en la actualidad las bebidas deportivas están compuestas para facilitar una rápida absorción de agua y electrolitos, gracias a su aporte en carbohidratos, reposición de electrolitos en sodio y reposición hídrica.

¿Cómo se debe hidratar un atleta?

Es importante mencionar que cada cuerpo y disciplina deportiva es diferente y exige distintos tipos de hidratación, sin embargo, los especialistas tienen algunas sugerencias estándar para los atletas, las cuales compartimos:

Antes de la actividad deportiva: Se sugiere una toma de unos 400-600 mililitros de agua una o dos horas antes del ejercicio a realizar. Ello ayudará a que exista un menor aumento de la temperatura corporal.

Durante la actividad deportiva: Una vez que el atleta arranca con su actividad se sugiere que comience a beber líquidos lo más pronto que pueda y en intervalos regulares, para que comience a reponer el agua y los electrolitos perdidos por medio de la sudoración.

Al finalizar la actividad deportiva: El atleta debe comenzar a beber líquidos tan pronto como le sea posible tras culminar su actividad, ya que será fundamental para tener una recuperación adecuada. La cantidad puede variar, por lo que se recomienda pesarse antes y después de la actividad para determinar la cantidad de líquidos perdidos y con ello consumir lo que corresponde.



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