Así fue el declive del Ascenso MX hasta terminar en su desaparición
Desde 1994 hasta el viernes pasado, la División de Ascenso pasó por varias reingenierías; a la luz de hoy, todas sin los resultados esperados.
Luego de 15 años de constantes cambios en la Primera A, creada en 1994, la Asamblea de la Primera División reestructuró la segunda categoría en 2009, primero llamándola Liga de Ascenso y luego Ascenso MX, pero con todo y los cambios de nombre, el proyecto nunca se consolidó como debía.
La Liga de Ascenso nació en 2009 con la participación de clubes como Tijuana, Dorados y León, entre otros, que buscarían llegar al Máximo Circuito. Curiosamente, en ese momento clubes como Pumas Morelos y Cruz Azul Hidalgo aún tenían derecho a llegar a Primera, mientras que otras filiales como Tigres B o Socio Águila simplemente desaparecieron.
A lo largo de la década el Ascenso sufrió mucho para sostener una base de competidores. A medida que se reforzaban las medidas que exigía la Primera División para ascender, menos clubes podían cumplir con dichos objetivos.
José Antonio García, expresidente del Atlante que descendió en 2008, criticó ese cuaderno de cargos de la Federación Mexicana de Futbol que poco a poco acabó con sueños de muchos dueños de clubes.
“Por la exigencia del cuaderno de cargos, yo pregunto ¿por qué no está certificada la UdeG? ¿Por qué no está certificado Dorados que ya estuvo en Primera División? El Estadio de Zacatepec tiene 17 mil espectadores, el de Oaxaca tiene 17 mil”, cuestionó.
“El Eibar en España, en el País Vasco, tiene 7 mil espectadores y lleva cinco años jugando en Primera División; ahí juega el Barcelona, el Real Madrid; no es la capacidad, es la seguridad, las condiciones, ¿pero la capacidad? Es una justicia selectiva”.
DE 18 CLUBES EN 2016 A SOLO 12 EN 2020
Año con año, clubes que llegaban a la División de Plata fueron desapareciendo. Ejemplo de ello fueron Pumas Morelos, que dejó de ser relevante para la directiva y finalmente descendió a la Segunda División (Liga Premier) en 2013, cuando se convirtió en Delfines del Carmen.
“La han asfixiado, no dudo que de repente entró gente que creó problemas, pero siempre han habido ligas con equipos pobres y ricos”, agregó García.
La Liga MX ha solicitado desde 2018 que los clubes del Ascenso MX tengan una certificación que consiste, entre otras medidas, en tener un estadio con capacidad para 20 mil asistentes mínimo, así como estabilidad económica que sería avalada por la consultora Ernest&Young.
Otro de los grandes problemas que enfrentó esta división fue poder sostener los proyectos desde un punto de vista económico. El caso más creciente fue el de los Potros UAEM, que desde antes de iniciar el Clausura 2020 decidieron hacerse a un lado y no participar en el torneo. Ejemplo de esto también fueron los Alacranes de Durango en 2011 o los Indios de Ciudad Juárez.
El número de clubes ha variado a lo largo de la década, sin embargo, el cambio más significativo llegó entre el Apertura 2016 cuando había 18 clubes y este Clausura 2020 que se redujo a solo 12.
En ese tiempo fueron abandonando la Liga clubes como los Loros de Colima, Coras Tepic, Murciélagos de los Mochis, entre otros, que desaparecieron en otros años o cambiaron de sede.
‘¿QUIÉN PUEDE TENER INTERÉS?’
Con la desaparición del ascenso y descenso en este 2020 y la creación de una Liga de Desarrollo, varios personajes del futbol se han manifestado en contra. Tal es el caso de Rafael Lebrija, expresidente de la Primera División.
“Yo quiero ver qué interés puede tener un joven que está trabajando en la División esa que van a crear, no sé cómo le van a llamar; qué interés va a tener un joven cuando realmente no va a ascender el equipo al cual pertenece”, dijo Lebrija a Mediotiempo.