Liverpool, el legendario club inglés que nunca caminará solo
Dominó Europa de 1977 a 1984, pero sus locos fanáticos hicieron que su grandeza permaneciera oculta hasta que gestó el Milagro de Estambul en el 2005.
Nunca en la historia de la Champions League (antes llamada Copa de Europa) se había dado el caso de que un equipo se recuperara de un 3-0 en una Final, hasta que el Liverpool lo hizo el 25 de mayo de 2005; hoy conocemos ese episodio como el Milagro de Estambul.
En el Estadio Olímpico Atatürk, el AC Milan -un portentoso club que tenía cracks mundiales en cada línea- había tomado la ventaja, gracias a los goles de Paolo Maldini (minuto 1’) y Hernán Crespo (39’ y 44’), los cuales hacían suponer que el título estaba decantado y que solo había que cumplir con el trámite de los restantes 45 minutos, algo que al final no sucedió ante el asombro del mundo entero.
¿Cómo remontó el Liverpool contra el AC Milan?
Cuando se marcó el final de la primera parte, los Reds lucían desencajados, devastados, como si el partido estuviera finiquitado, hasta que Rafa Benítez reescribió el guion en el vestidor al sacar a Steve Finnan por Dietmar Hamann, jugada maestra con la que neutralizó a Kaká y controló el centro del campo, con el alemán apoyado en Xabi Alonso y Steven Gerrard.
También hay quien recuerda que Benítez lanzó un inspirador discurso que entre los aficionados se ha convertido en un mito; el estratega prefiere recordarlo solo con la frase: “¡Dense la oportunidad de ser héroes!”.
Los movimientos pronto dieron resultado, ya que Gerrard marcó el 3-1 al minuto con un cabezazo que cimbró al club italiano y que -a la par- encendió el ánimo colectivo de una afición tan única como su club.
Con el ensordecedor “You'll never walk alone” de fondo, Vladimír Šmicer (56’) y Xabi Alonso (60’) pusieron el 3-3 que mandó el juego a los penales, ronda en la que los ingleses ganarían por 3-2.
Una rica etapa y la tragedia
Liverpool había recuperado la memoria después de ganar cuatro Copas de Europa de 1977 a 1984 (1976-1977, 1977-1978, 1980-1981 y 1983-1984), de las cuales las tres primeras fueron con Bob Paisley, un sereno estratega que admitiría que “lo último que hubiera querido en el mundo era aceptar ese cargo”.
Había acabado con una larga espera que lo regresaba a la élite europea, una de la que se alejó de forma intempestiva y dolorosa. Gracias a Paisley, Europa empezó a mirar con respeto y asombro al equipo del puerto, en una era en la que Inglaterra estaba muy por arriba del resto de países en lo futbolístico. Paisley decidió alejarse en 1983 para que Joe Fagan, quien era su asistente, lo relevara para sumar un título europeo más en 1984.
Sin embargo, la barbarie de los hooligans acabó con esa etapa de brillo, ya que en la Final de la Temporada 1984-1985 –que perdió 1-0 ante Juventus- fueron los culpables de que murieran 39 personas, italianos casi todos.
A ese hecho se le conocería como la Tragedia de Heysel y le acarrearía a Liverpool múltiples problemas, siendo la suspensión de 10 años de la Copa de Europa una de las más duras, a pesar de que acabarían siendo seis años tras algunas negociaciones; como coletazo, el resto de equipos ingleses serían castigados cinco años por culpa de sus violentos seguidores.
El alejamiento del resto de Europa provocó un éxodo de futbolistas del que Liverpool no se recuperó sino hasta esa noche mágica en Estambul, en donde pusieron fin a una espera de 21 años sin ser campeones continentales y que sirvió para volver a atraer a los mejores jugadores y técnicos, siendo el más reciente Jürgen Klopp, el sonriente alemán que les dio su sexta Champions en 2019 y que aspira a sumar la séptima ante Real Madrid.
¿Cuántas Champions League ha ganado el Liverpool?