¡Palmeiras echa a Atlético Mineiro en épica tanda de penales!
El Bicampeón de la Copa Libertadores avanzó a Semis tras jugar con nueve hombres contra otro contendiente como el Gallo.
Epopeya con mayúsculas en el Allianz Parque de Sao Paulo. Palmeiras, actual bicampeón de la Copa Libertadores, resistió con dos jugadores menos en el tiempo reglamentario y avanzó este miércoles a semifinales en la tanda de penaltis por 6-5 ante Atlético Mineiro.
En un choque brasileño cargado de tensión, el equipo dirigido por el portugués Abel Ferreira estuvo sostenido por la inconmensurable figura de su portero, el internacional brasileño Wéverton, que detuvo la pena máxima decisiva al lateral Rubens.
Han sido los dos partidos más duros para el conjunto paulista en lo que va de competición. Empató 2-2 in extremis en el partido de ida y esta noche aguantó como pudo el 0-0 ante su afición, tras las expulsiones por roja directa de Danilo (m.29) y Gustavo Scarpa (m.81).
En semis espera Athletico Paranaense o Estudiantes de La Plata.
Atlético Mineiro pecó de falta de contundencia en los metros finales, en parte porque Hulk no fue Hulk.
El veterano delantero brasileño estuvo muy lejos de su mejor versión, como todo el equipo de Belo Horizonte, que también terminó con un hombre menos, tras la expulsión del chileno Eduardo Vargas (m.96).
El partido de este miércoles fue una demostración de cautela por parte de los dos contendientes. Mineiro intentó marcar terreno en el arranque presionando la salida de la pelota de Palmeiras, que poco a poco le fue tomando el pulso al choque.
Arana salvó en la agonía un centro raso de Dudu al segundo palo antes de la finalización de Scarpa, que lo intentaría minutos después con un disparo cruzado en el balcón del área.
Pero todo saltó por los aires con la expulsión de Danilo.
El volante brasileño de 21 años entró con los tacos de la bota al gemelo de Zaracho, una acción temeraria que fue castigada con amarilla por el colombiano Wilmar Roldán, decisión corregida por el VAR.
Con superioridad numérica, Cuca pidió "cabeza" a sus pupilos. Los espacios aparecieron solos. Mariano empezó a hacerse más presente en el carril derecho, aunque los locales no se deshilacharon y aguantaron el tipo hasta el descanso.
En la reanudación, la misma tónica. Los de Abel Ferreira bien agazapados atrás y esperando una contra mortífera, mientras que el conjunto albinegro buscaba un gol que se atisbaba definitivo.
Lo tuvo en la cabeza de Jair, que apareció sólo dentro del área. Zaracho y Alonso toparon con Wéverton, siempre bien colocado.
La presión de los visitantes cada vez era más notoria, pero seguían mostrando una preocupante falta de acierto. Ni con la entrada del creativo argentino Nacho Fernández y el delantero chileno Eduardo Vargas mejoró la situación.
Palmeiras se complicaría más la vida con una nueva expulsión, la de Gustavo Scarpa, tras dejar el pie (y los tacos) en el tobillo de Allan. Esta vez no se lo pensó y Roldán mostró la tarjeta roja sin el auxilio del VAR.
En los últimos minutos saltaron chispas entre las dos escuadras, que casi acabaron en las manos. En el tiempo de descuento, Hulk falló una clarísima y acertó otra en el palo en un centro sin dueño.
Aún habría tiempo para la expulsión por doble amarilla de Vargas, por sus airadas protestas a pocos centímetros de la cara del árbitro.
El pitido final fue un alivio para Palmeiras, que finiquitó en los penaltis la eliminatoria para seguir soñando con prolongar su reinado.