Columna de Antonio Moreno
¿Cuánto vale un jugador?
Editorial Mediotiempo
A menudo nos enteramos que un futbolista cuesta cinco, ocho o diez millones de dólares. Y mucha gente me pregunta ¿quién pone los precios, cuál es el parámetro, quién puede evaluar la diferencia entre uno de tres y otro de cinco?¿Acaso un tabulador dice que si es derecho vale más o menos, si le pega con la cabeza sube un millón, si es alto, el precio se duplica, es la edad, es la nacionalidad, es el futuro que se le ve?Mi respuesta, como estoy seguro será la de muchos es la más sencilla "la ley de la oferta y la demanda". Pero si nos vamos al fondo del asunto habría que decir que cotizar exactamente a un jugador es tan subjetivo como ponerle calificación a un cuadro de determinado artista.O sea que si yo soy capaz de ofrecer y comprar a un futbolista en 50 millones de dólares luego de que el año pasado ese mismo elemento valía diez, automaticamente estoy inflando el mercado y provocando que los hombres que se comparan en calidad a ese carísimo jugador que adquirí den un salto en su precio pues no son menos que él.Es así como hoy en día escuchamos de cantidades estratosféricas y no sólo en el futbol sino en muchos otros deportes. Se habla de millones de dólares como si se taratara del "banco de la ilusión" con el que jugábamos turista.¿Y díganme ustedes cuántas veces han escuchado que un Doctor del "Ángeles" pase a "Médica Sur" por 5 millones de dólares o que un maestro de la "Ibero" firme por dos años con el "Tec" y se lleve las primeras planas?Es un hecho que el deporte profesional ha marcado rumbos exagerados en eso del dinero. Es cierto que se trata de un gran negocio en el que los grandes patrocinadores invierten fortunas y donde los organismos recuperan también cantidades estratosféricas pero hay que reconocer que las sumas que con naturalidad se manejan por tal o cual jugador ya resultan exageradas.Hoy el tema es que dicen que el extraordinario portero mexicano Guillermo Ochoa está valuado en casi 10 millones de dólares... ¿Y porqué no 15, 30 ó 100 pregunto yo? Al fin y al cabo si alguien los paga, eso cuesta y eso vale.Y yo te cuestiono amigo lector de Medio Tiempo ¿cuánto vales tú, cuánto vale tu ser más querido, cuánto vale tu mascota, cuánto vale tu pareja, cuánto vale tu mejor amigo?, ¿acaso es tan fácil ponerse precio?, ¿tu hijo aplicado es más caro que el distraído? Incongruente ¿verdad?Pero exactamente con estos absurdos ejemplos quiero dejar claro que al menos para mí el indíce de precios y cotizaciones futboleros que se maneja hoy en día es muchas veces verdaderamente ridículo.Y así las cosas si se trata de calidad sobre el tema de Memo Ochoa yo haría la siguiente operación : Juventud: 4 millones de dólaresPosición: 2 millones de dólaresExperiencia: 1 millón de dólaresElasticidad: 2 millones de dólaresReflejos: 2 millones de dólaresCarisma: 3 millones de dólaresFuturo, como dice el anuncio: "no tiene precio"Y ahora tú amigo lector.... ponle a los jugadores el valor que quieras y si alguien lo paga, eso cuestan.
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