Regresa la afición en el Azteca en medio de una ola celeste

Poco más de 20 mil seguidores se dieron cita esta noche en el Estadio Azteca. El Coloso de Santa Úrsula abrió sus puertas tras poco más de un año de no albergar las emociones de los aficionados por la pandemia del coronavirus.

Hoy, Cruz Azul fue el primero de los dos equipos que alberga el Azteca en sentir la emoción de tener sus cánticos de viva voz y no a través de un sonido local.

Con un protocolo sanitario rápido, pero a la vez sin algunos elementos como medición de temperatura, el estadio recibió a los seguidores que tras pasar por la revisión rutinaria por parte de los elementos de seguridad pública, fueron recibidos por estaciones de gel antibacterial y un mensaje en altavoces que les recordaba en todo momento las medidas a seguir.

El uso de cubrebocas, no fumar, evitar aglomeraciones y respetar las señalizaciones tanto de tránsito peatonal como de los espacios libres en la butacas, se convirtió en el rosario de la tarde.

Eso sí, una vez que algunos seguidores pasaban el filtro, se olvidaron de las indicaciones pues se retiraban el cubrebocas para tomarse fotos o darle un trago al vaso de cerveza que fue adquirido en una de las estaciones de venta que fueron colocadas y que tampoco respetaron del todo la sana distancia.

No todas las zonas del Azteca fueron abiertas, las cabeceras lucieron con un límite a la mitad. Los espectadores fueron colocados con una buena distribución de espacios entre las butacas, incluyendo las porras de los dos equipos.

POCA AGUA

Un detalle a notar fue que en los baños del Azteca no funcionaba del todo bien en la distribución de agua, pues no todos los lavamanos contaban con el líquido, incluso, los dispensadores de jabón tampoco tenían tanto producto.

PROTOCOLO RÁPIDO

Alberto, un aficionado de la Máquina que logró adquirir un boleto para volver a apoyar a su equipo en el Azteca, destacó que el protocolo sanitario fue eficaz.

“Yo lo veo bien, la mayor responsabilidad cae en nosotros porque si no ponemos ese granito de cuidarnos y protegernos pues no funciona. Ellos hacen su mayor esfuerzo y nos toca a nosotros”.

Por su parte, Fernando, seguidor de Toluca y que hizo el viaje desde el Estado de México calificó de rápido el protocolo y eso ayudó a agilizar el ingreso de los asistentes sin aglomeraciones.

“El protocolo está bien, fue rápido. Lo indispensable es que vayan poco a poco. Ayudó que fuera poco el aforo porque de ser más seria un relajo”.