Federico Viñas de niño repartía comida, ahora lo hace con goles clave en América
Con 21 años, Federico Viñas dio el salto de su vida desde el modesto Juventud de las Piedras en Uruguay a las Águilas donde ha sido clave en la Fiesta Grande.
Federico Viñas se ha convertido en el hombre gol del América en la Liguilla del Apertura 2019, con varios goles cruciales, el último de ellos este domingo para empatar el global en la Final de Vuelta contra Rayados.
Antes, el uruguayo que pasó casi desapercibido durante la Fase Regular marcó otra anotación vital en Semifinales para remontarle al Morelia en el Azteca, mismo que le dio el pase a la Final a las Águilas. Previamente marcó otro de similar valía ante Tigres en Cuartos en el Volcán.
El joven delantero uruguayo de 21 años ha superado las expectativas no solo del propio club sino de la afición, siendo un jugador muy joven que desde su país natal describen como un chico muy tímido, pero que ya daba muestras de calidad.
Las Águilas lo captaron del modesto Juventud de las Piedras en Uruguay. Ahí, Viñas surgió de las inferiores del Liverpool de Montevideo, pero antes de llegar al Juventud tuvo que abandonar el futbol y dedicarse a ser repartidor de fiambre, un tipo de embutido muy característico de Uruguay.
"El recuerdo que yo tengo de él es que era un 'botija' (niño) muy tímido, muy callado, por lo menos desde el punto de vista exterior. A comparación de otros jugadores, siempre fue un gurí (un chico), un muchacho bastante reservado”, recordó a Mediotiempo, Eduardo Castro, miembro del área de Comunicación del Juventud y quien convivió por dos años con Viñas antes de emigrar al América.
Lo de meter goles importantes no es nuevo en la carrera de Viñas porque el atacante ahora azulcrema fue parte fundamental del ascenso a Primera División que logró el Juventud a finales del año pasado, siendo goleador en el equipo.
"Por supuesto que emociona ver a un jugador que debutó con nosotros en Primera; estuvo dos años, hizo una notable campaña en Segunda, ascendió con el plantel a Primera y tuvo goles importantes en Segunda y en Primera. Un joven que se sabía que tiene proyección y futuro por sus condiciones" , agregó Castro.
En el torneo regular, Viñas marcó dos goles al participar en apenas cinco partidos, con 128 minutos disputados. En cambio, en Liguilla llevaba 345 minutos antes de la Final de Vuelta, en la cual marcó su tercer tanto en esta Fase, para un total de cinco en el torneo.
El propio Miguel Herrera ha expresado lo satisfechos que están en el club con Viñas, cuya carta comprarán por alrededor de los seis millones de dólares, toda vez que el charrúa ha mostrado que está plenamente adaptado al futbol mexicano.
"Para eso lo trajimos (para anotar), sabemos la capacidad del muchacho y en cualquier momento poder usarlo y además levantó la mano y dijo: 'estoy listo para cuando me utilicen'”, explicó el Piojo.
Cuando lo tuvimos que mandar a Sub-20, supo ir ahí, mantener el ritmo, hacer goles, trabajar y eso es lo que me deja muy tranquilo, que le dijimos al muchacho que tenía que venir a ganarse un lugar y ha levantado la mano y se lo ha ganado en la cancha".
Es así como Federico Viñas, quien también ya llamó la atención de la Selección de Uruguay, porque ha sido convocado a la Sub-20 para una concentración previo al Preolímpico de Sudamérica, ha sido una total revelación en la Liga MX y busca ser una de las armas principales de las Águilas para levantar su título de Liga número 14.