Piloto Jiménez borró rebanón con título y la burla fue otra: el beso de Nahuel
La dramática serie de penales en CU en la Final del 2015 tuvo como colofón, el 'tierno' beso entre Israel Jiménez y el Patón Guzmán.
Israel Jiménez había sido la burla del futbol regiomontano tras un rebanón que dejó eliminado a Tigres en los Cuartos de Final del Clausura 2013 ante el archirrival Rayados, pero el destino le dio la oportunidad de borrar ese recuerdo convirtiéndose en el héroe del título del Apertura 2015 ante Pumas, al ser el cobrador del penal del campeonato, que se selló con la imagen de Nahuel Guzmán plantándole un beso en la boca.
En aquel partido de Vuelta del 2013, Rayados había ganado en el Tec la Ida 1-0 y en la Vuelta en el Volcán Tigres empató, perfilado a remontar, hasta que el Piloto intentó despejar un balón sin peligro pero envió el balón a su propio arco, lo que dejó a los felinos fuera de la Liguilla.
Sin embargo, al llegar el momento en la tanda de penales ante Pumas en la Final de diciembre 2015 todo se olvidaba si concretaba, pues significaba el cuarto título de Tigres, con lo que empataba al Monterrey en estrellas de Liga. Y Jiménez lo logró, si bien ello quedó en segundo plano porque destacó más el beso de Nahuel.
“El beso se lo mereció, era lo mínimo que podía hacer, con la tranquilidad que tiró Isra, se lo merecía”, dijo el Patón Guzmán días después.
Pero el penal acertado quedó aún más opacado porque en los vestidores de C.U. el Piloto apareció desnudo al fondo de una foto que su compañero Joffre Guerrón se tomó con el Tuca Ferretti. La imagen la publicó el ecuatoriano en redes sociales y de inmediato se hizo viral.
¿POR QUÉ LE DICEN PILOTO?
Era 18 de agosto del 2010, época en que los jugadores de Tigres acostumbraban a salir de la Cueva de Zuazua a exceso de velocidad. Ese día, Israel Jiménez y Alan Pulido decidieron jugar ‘carreritas’ y el primero de ellos terminó volcando su auto.
Según reportó Ricardo Martínez, el perito que acudió a recabar las evidencias en el accidente, el carro de Jiménez derrapó 45 metros antes de voltearse y para su fortuna resultó con lesiones leves.
Este hecho se dio cuando Israel intentó rebasar el auto que era conducido por el menor de los hermanos Pulido en el camino que conduce de las instalaciones de entrenamiento a la carretera de Zuazua. Fue ahí que no midió la distancia con el otro vehículo, alcanzó a pegarle y perdió el control. Desde entonces, fue apodado el Piloto.