América hila tercer triunfo: derrota 2-1 a los Xolos de Miguel "Piojo" Herrera
Las Águilas están invictas en el torneo y completan una semana perfecta ganando sus tres partidos.
La semana del América fue perfecta, las Águilas consiguieron tres victorias en la misma cantidad de juegos en la fecha doble, luego de vencer en el Estadio Azteca 2-1 a Xolos, y con eso mantener una buena racha y el invicto en lo que va del torneo.
Este América de Fernando Ortiz, que ha ido de menos a más en el certamen, es ya un candidato firme para ser campeón por la manera en la que juega, y porque es un aniquilador en ofensiva.
Ante el Tijuana dejaron sin posibilidades al equipo de Miguel Herrera, que es una escuadra sin alma, que sólo se presenta en la cancha, pero que no hace nada dentro del terreno de juego, que no impone ningún tipo de respeto.
¿Error o acierto, el gol de Leo?
El primer gol del juego fue prácticamente acabando el primer tiempo, un error grosero de Toño Rodríguez en un tiro libre cobrado por Leo Suárez, valedero para que se abriera el marcador.
El local entendió que el juego estaba en sus manos, Tijuana sin ángel en el campo no significaba mayor riesgo y con el inicio del segundo tiempo cayó el segundo tanto de los azulcremas que fue a través de Diego Valdés.
Gran acción de Henry Martín
Henry Martín, capitán y mejor jugador crema del curso, peleó por el esférico, con tal suerte que lo ganó y, al ingresar al área, perfilado, decidió mandar a su compañero camiseta '10', quien solamente tuvo que anidar la redonda al fondo de las redes.
Cierre con comedero de uñas...
Todo parecía calmo en el Estadio Azteca (un año invicto el equipo) para los del Tano, incluso por la expulsión de Misael Domínguez a los 23 segundos de haber ingresado le daban a las Águilas una noche tranquila, pero todo se fue descontrolando.
En los últimos minutos del juego, el visitante se acordó que el futbol es de tener la pelota, de tratar de ir al frente, y con un golazo de Silvio Martínez se acercaron en el marcador y maquillaron un poco la derrota, porque hasta antes de eso era una victoria fácil para el milloneta.