Detienen el Santos-Toluca de Liguilla por grito y el árbitro 'se hizo loco' para no suspenderlo
Lamentable comportamiento de los aficionados de Santos Laguna en la eliminación ante Toluca con gritos homofóbicos en todo momento sobre el final.
Un partido lamentable de Santos Laguna dentro y fuera de la cancha este domingo, en el que no pudieron defender su calidad de invictos en el Estadio TSM. Los Guerreros fueron eliminados en Cuartos de Final por los Diablos Rojos del Toluca con un marcador de 1-2 (6-4 global) y los aficionados santistas se comportaron incorrectamente.
En la desesperación de ver a su equipo totalmente superado y tirando contra Tiago Volpi por ser la figura de los Diablos y provocar la expulsión del delantero Javier Correa, la afición de Santos le lanzó el grito homofóbico repetidamente, hasta que el árbitro tuvo que parar el partido de Liguilla.
"Envalentonados" porque no hay manera de sacar a miles de individuos de un estadio pese a los esfuerzos de la Federación Mexicana por erradicarlo, los hinchas de Santos Laguna se cansaron de gritar "¡Eh p*to!" en los despejes de Volpi, tanto con el pie como con la mano, y hasta en los tiros libres del Toluca.
Santander 'se hizo el loco' con varios gritos
La gente en los últimos 10 minutos se dedicó a gritar en todo momento. De hecho, antes de que por fin se cumpliera el primer paso del protocolo, los aficionados de Santos gritaron dos veces "¡Ej p*to!" sin que el árbitro, Luis Enrique Santander, hiciera algo al respecto. Fue hasta la tercera reincidencia que se tomaron acciones, ante abucheos y mentadas de madre.
El mismo árbitro Santander pidió a Tiago Volpi que reanudara rápido o de manos para buscar mitigar la expresión homofóbica desde las gradas, pero era demasiado tarde porque en todo balón tocado por el guardameta de los Diablos y hasta en los tiros libres o de esquina sonó el reprobable grito.
Aunque las condiciones eran obvias para la suspensión definitiva del compromiso de los Cuartos de Final, Luis Enrique Santander optó por "hacerse el loco" y dejar pasar los últimos minutos, en los que los Guerreros metieron el gol de la honra.