Rodolfo Pizarro, de entrenar solo en cancha descuidada, a compartir el vestidor con Messi
En 2010 Cacha Arévalo vivió algo similar; jugó en cancha amateur en Monterrey y se fue al Mundial con Uruguay al lado de estrellas.
Rodolfo Pizarro vive un sueño en el Inter Miami, a pesar de haberse lesionado, ya que el mexicano no solo ha estado recuperando su nivel en la MLS, ahora compartirá vestidor con Lionel Messi, quien recién fue anunciado como refuerzo de lujo para el equipo de Florida.
Hace seis meses, Pizarro pasó por el peor momento de su carrera, pues parecía venirse abajo; era rechazado de Rayados y Chivas, y tuvo que entrenar por su cuenta, solo en una cancha descuidada de Tampico.
¿Por qué Pizarro entrenó solo en Tampico?
El accionar de Pizarro en el Inter Miami no fue tan espectacular en 2020 y 2021, por lo que regresó prestado a Rayados con opción de compra, pero tampoco en la Pandilla pudo brillar en todo el 2022, así que no hicieron válida el comprar a este elemento.
Ante esto, Pizarro se ofreció a Chivas, donde tuvo buenos torneos en 2017 y 2019; incluso, estaba dispuesto a recibir un salario más bajo, pero ni así lo quisieron; era diciembre 2022 y tuvo que entrenar solo para luego reportar en 2023 con Miami, donde sentía que no la pasaría bien.
Su futuro estaba en el aire y debía mantener un buen estado físico, por lo que acudió a entrenar a la cancha del Estadio de la Jaiba, la cual lucía descuidada, pero para Pizarro esto no importaba, no se rindió y ahora la vida lo premia, pues no solo levantó su nivel antes de su lesión, también tendrá el privilegio de jugar a lado de Messi.
"Creo que (me siento) mucho más maduro, el último año que estuve acá antes de irme no disfruté muchas veces como tenía que haber disfrutado. Hubo un tiempo que no estuve feliz para jugar, no estaba valorando lo que tenía y sí creo que fue eso. Que al irme y regresar valoro más lo que es esta institución y lo que es este equipo".
El caso de Egidio Arévalo, de entrenar en cancha de río al Mundial
Egidio Arévalo llegó a los Rayados en el Apertura 2007, bajo el mando de Miguel Herrera, pero su mejor nivel se vio con el arribo de Ricardo La Volpe en el Clausura 2008, aunque al final causó baja por buscar variantes en la nómina de extranjeros.
Cacha tuvo un regreso al futbol mexicano en el 2009 para jugar con el San Luis, con el que permaneció solo un torneo y al quedarse sin equipo, estuvo varios meses jugando en ligas amateurs de la Ciudad, en una unidad deportiva popular en el Río Santa Catarina que desapareció tras el paso del Huracán Alex en 2010.
Increíblemente, de ahí fue llamado meses después para el certamen mundialista de Sudáfrica 2010, perteneciendo aún al Monterrey, quien logró venderlo en enero 2011 al Botafogo.