¡Empate agridulce! Manchester United de Amorim dividió puntos ante Ipswich Town
Marcus Rashford y Omari Hutchinson fueron los responsables de sumarse al marcador.
Recién aterrizado en un banquillo de la grandeza y la exigencia de la historia del Manchester United, Ruben Amorim estrenó el desafío más grande de su carrera con un empate decepcionante contra el Ipswich (1-1) y con el portero André Onana como el mejor de su equipo, pese a que al minuto y 21 segundos ganaba por 0-1.
Ni siquiera tal marcador a favor, tan rápido, en casa del penúltimo de la clasificación, iluminó a los Diablos Rojos, ganador de tres de sus cuatro encuentros en la transición de Ruud Van Nistelrooy, pero de nuevo estrellado contra su propio presente entre las expectativas que ha despertado dentro y fuera del equipo la llegada del técnico portugués.
El 0-1 lo puso todo a favor. En un minuto y 21 segundos, en la primera ocasión, en el primer avance, Amad Diallo, el extremo por el que el United pagó 21 millones de euros al Atalanta hace cuatro años, se fue de todos los que salieron a su paso hasta los últimos metros, cuando centró al área para el remate de Marcus Rashford, que se adelantó a todos. Principalmente, al portero Muric, que no se enteró de nada cuando esperaba atraparla.
No le bastó al United. Desaparecido después en ataque, sometido por el Ipswich, Onana fue el único argumento que lo sostuvo en ventaja en el marcador hasta el minuto 43, cuando ya no pudo hacer nada con el zurdazo de Hutchinson. El toque en la cabeza de Mazraoui hizo imposible la estirada del guardameta, que, hasta entonces y también después, fue el mejor del inicio del nuevo proyecto de Amorim. Un protagonista descriptivo de su estreno.
Porque antes del 1-1 sacó una mano prodigiosa a un remate de Delap (aplaudía Amorim en su banquillo ante tal intervención de su guardameta) y porque después elevó aún más el nivel con la forma con la que negó el 2-1 al delantero del Ipswich Town, cuyo taconazo fue repelido por el cancerbero. También es cierto que Muric frustró una ocasión a Garnacho.
Nada decidido, todo abierto, ya sin ocasiones apenas en ambos lados, Amorim dobló la apuesta ofensiva, con la entrada al campo de dos delanteros, Rasmus Hojlund y Joshua Zirkzee, para desatascar un encuentro incierto. Con un 72 por ciento de posesión en todo ese recorrido del segundo tiempo, el United sólo lanzó dos tiros. El siguiente, ya en el minuto 78, fue una falta directa fuera de Bruno Fernandes. La última parada, en cambio, fue de Onana.