'Su hijo es un hijo de p...'; Maxi Rodríguez recordó cuando La Volpe se cruzó con su madre

Maxi recordó que La Volpe y su mamá se encontraron en Rosario, algo que aprovechó el DT para sacar su frustración por la eliminación del Tri ante Argentina en el Mundial de 2006.

La Volpe nunca olvidará el golazo de Maxi Rodríguez al Tricolor. (Foto: Mexsport)

Ricardo La Volpe nunca digerirá la eliminación de la Selección Mexicana a manos de Argentina en la Copa del Mundo de Alemania 2006, y menos olvidará que el culpable de esa derrota fue Maxi Rodríguez, jugador que sigue en activo en Newell's Old Boys.

Tanta ha sido la animadversión que le ha tomado el Bigotón a Maxi que incluso llegó a tener un tenso cruce con la madre de este cuando se la encontró en un restaurante de Rosario, todo tras recordar que con un golazo puso el 2-1 que llevó a la Albiceleste a los Cuartos de Final.

"La Volpe estaba en un restaurant en Rosario y el dueño le dice '¿A qué no sabes quién es esa mujer?'. Él le dice que no sabía y el dueño le cuenta que era la mamá de Maxi Rodríguez. Ahí La Volpe va, la saluda y le dice 'Yo sé que usted no tiene nada que ver, pero su hijo es un hijo de p...'. Es una anécdota que quedó para el recuerdo", señaló el jugador en entrevista para la cadena TyC Sports.

Hace algunos días, el propio La Volpe recordó que le dijo de todo a Gonzalo Pineda por no haber marcado de manera correcta a Maxi y haber dejado que soltara un riflazo que derrumbó al Tricolor.

La divertida anécdota junto a Nahuel Guzmán

Por otra parte, Maxi Rodríguez rememoró un peculiar episodio junto a Nahuel Guzmán, hoy portero de Tigres, cuando ambos jugaban en Newell's y se enfrentaron a Boca Juniors en los Cuartos de Final de la Copa Libertadores. En tanda de penales, tras quedar 0-0 en el global, el Patón se animó a contarle un chiste previo al cobro definitivo, que a la postre significaría el pase de su club a Semifinales. 

"Era tanto el sufrimiento que había de los dos lados que no se terminaba más. Nunca me pasó nada igual. Me tocaba definir a mí y cuando voy caminando, llego a la medialuna, el Patón me abraza y se me pone a contar un chiste cortito. 'Yo sé que que no estás nervioso, pero te lo voy a contar igual', me dijo. Está loco, es demasiado especial", rememoró. 


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