Pese a su pérdida de visión, Don Juan no conoce los límites y apoya al Tri en Qatar 2022
Un aficionado mexicano con ceguera está viviendo su segunda Copa del Mundo, donde es apoyado por su hijo, quien le relata los partidos en el Estadio, aunado a que se apoya en narraciones de radio.
El futbol no tiene límites ni discapacidades. Así lo entiende y hacen notar de gran manera Juan García y su hijo, del mismo nombre, quienes están viviendo en Qatar 2022 su segundo Mundial juntos.
Don Juan, viste la playera de México, sufre y goza como cualquier otro aficionado, la diferencia es que él, es ciego, pero gracias a su hijo, al teléfono y a los sonidos del estadio, se da cuenta de todo lo que sucede en la cancha; esa dinámica la adoptaron desde Rusia 2018 y así pasan grandes momentos.
“Cuando eres aficionado desde niño, la pasión no cambia, y te adaptas a las nuevas circunstancias. Yo creo que es igual de emocionante estar aquí”, dijo Don Juan en entrevista con mediotiempo.
“Traigo mis audífonos y mi radio, estoy al parejo oyendo la transmisión y en el estadio con una oreja en cada lado, y él (hijo) es muy descriptivo, me narra mucho", añadió.
Nacido en Acatic, Jalisco, pero radicado en Los Ángeles, California, Don Juan perdió la vista a los 20 años por un glaucoma, pero eso nunca le quitó la pasión al futbol; por ello, en Qatar se mueve en el metro como cualquier persona, pero siempre apoyado de su hijo y de su bastón.
“Es el mensaje, y es bien importante, porque yo se los mando a los propios discapacitados, porque hay personas que su condición los encierra, o los hace tener actitudes un poco agresivas con la gente. Yo les digo a todos los discapacitados, de cualquier dificultad: sordos, ciegos, mudos, cojos, paralíticos. Que vivan la vida, porque la vida es para vivirse. 'Nomás' tenemos una condición. Las limitaciones igual las tienes tú. Ya se está cambiando la cultura y cada vez veo a más personas en la lucha”, aseguró.
“Yo soy de campo en México. De Jalisco y allá la pasión es muy grande. Somos chivistas desde que nacimos, casi. De ciego (el futbol) lo jugué un poco, cuando era joven. En la Ciudad de México hay una Liga de soccer para ciegos, y ahí le metí patadas un rato”, añadió.
Los dos Juanes aparecieron en la estación Ras Bu Aboud, del metro de Doha. A paso lento, caminaron una parte antes de salir a la explanada del Estadio 974 para estar en el partido entre Brasil y Suiza (1-0) del lunes.
“Yo fui a Rusia. Me llevó (su hijo). Fíjate que Qatar nos ha tratado de maravilla a los discapacitados, es una cultura que teníamos miedo de venir por las restricciones y todo lo que se comentaba. Pero mis respetos para la gente qatarí, nos están tratando muy bien. Rusia no me puedo quejar, pero las distancias en Rusia de un partido a otro eran 24 horas, aquí son 40 minutos de un estadio a otro”, mencionó Don Juan.
Su hijo lo disfruta
Para su hijo Juan, el vivir estos momentos con su padre es un sinónimo de gran emoción, y más en fechas como se dio en Rusia 2018, cuando celebraron el Día del Padre con el triunfo del Tri sobre Alemania (1-0) con el gol de Hirving Lozano.
“Ya van dos (Mundiales) que Dios me da la oportunidad. Cuando fuimos a Rusia especialmente, contra Alemania era el Día del Padre, entonces el partido ganándole y en combinación del día que era, estar con él fue un gran sentimiento. A la gente que no se ha animado, que tiene las posibilidades de hacer el esfuerzo, vale la pena. La piel cada vez que hacemos esto, aunque sea mi cuarto Mundial, se me pone chinita y se me salen las lágrimas con mi papá a mi lado, es un sentimiento que no creo se pueda superar”, relató el hijo de Juan.
“Sí, y si Dios nos da la oportunidad vamos a tratar de seguir esa tradición hasta que el dinero y las posibilidades físicas nos permitan".
Lanzan un llamado al Tri
Y en su condición, Juan vive su partido a su manera, y aprovecha para pedirle a los jugadores de la Selección Mexicana que le pongan más ganas y dejen las poses de lado, una vez que están cerca de quedar eliminados del Mundial de Qatar 2022.
“Se están muriendo de nada. No les ves actitud, yo por ejemplo, ví a los árabes cómo se mataron en la cancha. Vi, es una manera de decir entre nosotros. Vi a los iraníes, los coreanos, dieron la piel por su país. Eso creo que nos hace falta, dejar de ser vedettes un ratito en el futbol y ser obreros de la cancha”, lanzó.
“Siempre apoyando, a pesar de que nos suben y luego nos bajan. Yo me recuerdo en el Mundial de Rusia, le ganamos a Alemania el primer partido y luego nos caímos. Yo tenía fe que con Argentina íbamos a hacer algo diferente".
Desde lejos, amigos y familiares de los dos Juanes viven también la felicidad de ambos, pues documentan con fotografías y videos todas sus travesías juntos, pues comparten la pasión y el amor por la redonda.
Don Juan es aficionado de las Chivas, y vibra cuando habla de Benjamín Galindo, su más grande ídolo, pero ahora se centra, aunque luce muy complicado, en que México se meta a la siguiente ronda en Qatar 2022.
“El que más gocé es el de Alemania. El que más lloré fue el de Argentina. Nos minimizan mucho, y nomás les damos un poco de chance que lo hagan, sí nos dolió”, comentó, antes de ser llevado en un carrito de asistencia dentro del Estadio.
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