Niños Campeones de 1957, los pequeños gigantes que nunca serán olvidados

Hablar del presidente de Sultanes de Monterrey, José Maiz García, es hablar de una leyenda, ya que fue parte de los Niños Campeones de 1957, pequeños gigantes que jamás serán olvidados.

Pepe, al igual que Ángel Macías, quien fue la estrella del Juego Perfecto, así como el resto del equipo que representó a Monterrey y México en Williamsport, Pensilvania, nunca dejarán de ser niños, pues su logro a los 12-13 años de edad fue histórico.

Don Pepe fue jardín izquierdo en ese torneo inolvidable de 1957, luego de que un año antes, a los 12 años fue inscrito en la Liga Industrial de Monterrey. Ese título fue después filmado en una película en 1960, protagonizada por los mismos peloteros; después en 2007 salió una nueva versión.

"Es un recuerdo que te queda para siempre. Muchos ya se nos adelantaron", dijo Maiz, quien recuerda cómo era Monterrey en 1957, una época donde no todos los niños iban a la escuela, las niñas menos; tener televisión era un lujo, nada que ver con lo que se vive en la actualidad, pero lo que sigue en pie es la pasión por el beisbol que desde pequeño se puede sentir.

"En deportes en conjunto no hay duda, lo más grande que ha tenido México es el campeonato mundial del 57. Ángel no se había dado cuenta que pitchó un juego perfecto, hasta que ya veníamos de regreso a Monterrey, después de haber estado en la Casa Blanca y después e haber visitado al Presidente de México en la capital, cuando volábamos cerca del aeropuerto del norte el capitán nos dijo que nos asomáramos por la ventana, había una fila muy grande de personas que nos estaban esperando".

"Cuando íbamos hacia la Macroplaza íbamos en unos coches que se calentaron tanto porque no podía avanzar por toda la gente, nos quitaban las cachuchas y tuvimos que bajarnos y caminar hasta el Palacio de Gobierno. Entonces entendí que habíamos hecho algo muy grande", apuntó.

​

​

​

​

​

​

​