Afición mexicana recibió a Djokovic como 'rock star'

Como verdadero rock star, así fue el recibimiento que tuvo el serbio Novak Djokovic a su entrada a la cancha central del complejo Mextenis en Acapulco, donde el número dos del mundo realizó su primer entrenamiento en tierras mexicanas.

Pocas veces se ha visto una ovación igual en el estadio del Abierto Mexicano de Tenis y no importó que se tratara solo de una sesión de práctica. Apenas salió Nole del vestidor, el público estalló y se rindió ante el ganador de 12 Grand Slams.

La comunión entre el de Belgrado y la tribuna fue inmediata. Ellos le celebraban cualquier gesto, incluso le cantaban “oe, oe, oe, Nole”, y el respondía con bailes y señas de aprobación. En solo unos minutos, Djokovic se convirtió en un ídolo y se echó a la bolsa a los aficionados mexicanos.

Con la parte baja del estadio abarrotada, en un hecho nunca antes visto durante un entrenamiento en el torneo, Djokovic demostró que la timidez no es lo suyo. Se atrevió a hablar en español para pedir agua y luego repartió las botellas entre sus aficionados. También le pedía a sus sinodales, dos jóvenes tenistas locales, que le sacaran más al cuerpo.

El segundo del ranking mundial de la ATP se dio tiempo de intercambiar palabras con una aficionada y su novio. Al final, Djokovic aplaudió el esfuerzo y los destellos que demostraron sus compañeros de práctica, quienes no pudieron esconder la emoción por compartir cancha con el tenista balcánico.