Autoridades de Gaza reportan al menos 90 muertos por ataque israelí contra una escuela
El ejército israelí justificó el ataque y aseguró que en el lugar operaban terroristas de Hamás.
La defensa civil de Gaza afirmó el sábado que un ataque israelí mató al menos a 90 personas en una escuela que, según el ejército hebreo, albergaba un centro de mando del movimiento islamista Hamás que gobierna ese territorio.
"El balance mortal está ahora entre 90 y 100 y hay decenas más de heridos. Tres cohetes israelíes golpearon la escuela que acogía a desplazados palestinos", dijo el portavoz de esta agencia, Mahmud Basal, a la AFP.
La oficina de comunicación del gobierno del enclave palestino estableció un balance más elevado, de "más de cien mártires", por la acción contra este centro situado en Ciudad de Gaza.
La acción, similar a otros ataques ocurridos el jueves contra dos escuelas en la misma ciudad, ocurre en medio de un intento de relanzar la próxima semana las negociaciones para una tregua en las que Israel aceptó participar.
El sábado temprano, el ejército israelí señaló que había "golpeado con precisión a terroristas de Hamás que operaban en un centro de comando y control incrustado en la escuela Al Taba'een".
El portavoz de la defensa civil de Gaza describió la acción como una "masacre horrorosa". "Los equipos están intentando controlar el incendio para retirar los cadáveres de los mártires y salvar a los heridos", afirmó en Telegram.
El jueves, esta agencia ya había reportado que ataques israelíes contra dos escuelas en Gaza habían matado a más de 18 personas, entonces, el ejército israelí afirmó que los centros albergaban también centros de mando del movimiento islamista palestino.
Operación en Jan Yunis
Después de más de diez meses de guerra estallada por el ataque de Hamás del 7 de octubre, las tropas israelíes se encuentran combatiendo en lugares que previamente aseguraba tener bajo control.
El conflicto ha disparado la tensión en Oriente Medio, en alerta especialmente después de las muertes del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, en Teherán y de un comandante del movimiento islamista libanés Hezbolá en Beirut.
Israel solo ha reivindicado el segundo de estos ataques, pero Hamás e Irán lo acusan también de la muerte de Haniyeh y han prometido venganza.
Ante la perspectiva de una deflagración regional, Catar, Egipto y Estados Unidos reclamaron el jueves a ambas partes volver a las negociaciones indirectas para pactar un alto el fuego y la liberación de los rehenes tomados por Hamás en su ataque de octubre.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, acusado por opositores, analistas externos y por Hamás de querer prolongar la guerra para sacar rédito político, aceptó el jueves participar en estas nuevas conversaciones.
Sin embargo, su ejército lanzó el viernes una ofensiva terrestre en Jan Yunis, una ciudad en el sur de la Franja de Gaza de donde sus tropas se habían retirado en abril tras meses de combates contra Hamás.
Los habitantes del este de la ciudad, que habían recibido órdenes de evacuación en la víspera, huyeron a pie, en burros, autos o motocicletas por sus polvorientas y devastadas calles.
"Hemos sido desplazados 15 veces. ¡Ya basta! Somos civiles y no somos responsables de esta situación", dijo a la AFP Mohamed Abdeen.
Según estimaciones de la oficina humanitaria de Naciones Unidas (OCHA), "al menos 60 mil palestinos podrían haberse desplazado hacia el oeste de Jan Yunis en las últimas 72 horas", dijo la portavoz de la ONU, Florencia Soto Nino.