¡Meteorito no extinguió a los dinosaurios! La teoría del IPN que cambiaría la historia

El Instituto Politécnico Nacional de México dice que hay pruebas para desmentir que los animales se extinguieron por un meteorito y hablan de una erupción.

Los dinosaurios se extinguieron al final del periodo Cretácico. (Google)

¡Se derrumba el mito del meteorito que extinguió a los dinosaurios! En México, un equipo de investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) dijo contar con suficientes evidencias para asegurar que los seres que habitaron la tierra hace millones de años no murieron por la conocida teoría del choque de un cuerpo celestial en la península de Yucatán.

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¿Qué extinguió a los dinosaurios?

Apegados a las evidencias geológicas, mineralógicas y estratigráficas, los especialistas del IPN sostienen que fue una "erupción volcánica subacuática" lo que extinguió a los dinosaurios al final del periodo Cretácico, todo esto según un artículo publicado en la Gaceta Gondwana, revista de la Asociación Mexicana de Geólogos Petroleros.

Para la investigación se analizaron materiales provenientes de más de 100 pozos petroleros perforados por Pemex al sur del Golfo de México, algunos de ellos ubicados en la supuesta zona del impacto del meteorito.

¿Cuál es la teoría del IPN sobre la extinción de los dinosaurios?

"El estudio de la secuencia de rocas carbonatadas de origen marino transicionales en la zona de contacto entre el Cretácico-Paleoceno no arroja ninguna evidencia geológica relacionada con el supuesto impacto de un cuerpo litológico extraterrestre en la región, incluido el iridio, lo que nos lleva a replantear seriamente el mito del meteorito de Chicxulub", expuso Abelardo Cantú, coautor de la investigación.

La hipótesis que hasta ahora genera más consenso en la comunidad científica para explicar la quinta extinción masiva de la Tierra es el impacto de una enorme roca en Chicxulub, que habría tenido una potencia equivalente a 10 mil millones de bombas atómicas como la de Hiroshima.

Pero en la zona del supuesto impacto, según Cantú, con un registro geofísico de mil 200 metros de profundidad se observa la presencia de sedimentos de origen volcánico, como son cenizas, lavas, vidrio volcánico y bentonita, entre otros.


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