¡Reyes de la capital! Diablos Rojos se apoderan de la Ciudad de México
El campeón de la Liga Mexicana de Beisbol llevó más de 500 mil personas durante la temporada regular.
En este 2024, la Ciudad de México ha adoptado a los Diablos Rojos como su equipo predilecto. En lo que va del año, el conjunto de la Liga Mexicana de Beisbol metió más aficionados a su estadio, de lo que han registrado hasta el momento América, Cruz Azul y Pumas, respectivamente en la Liga MX.
Por ejemplo, los Diablos registraron durante la temporada regular, sin contar los playoffs ni la Serie del Rey, una asistencia total de 505 mil 786 personas al Harp Helú. En tanto, América ha acumulado 376 mil 788 aficionados durante la fase regular del Clausura 2024 que jugó en el Azteca, y del Apertura que está disputando este semestre en el estadio de la Ciudad de los Deportes, donde ha padecido de muy malas entradas.
Después sigue Cruz Azul, que este año ha jugado casi todos sus partidos de local en ese mismo inmueble -a excepción de uno que jugó en el Azteca- con una asistencia de 357 mil 309 seguidores, y por último está Pumas que en el 2024 ha recibido a 313 mil 782 personas en el estadio Olímpico Universitario.
Beisbol, con más juegos
Eso sí, se tiene que establecer que la temporada regular de Diablos como local comprendió 43 partidos en el Harp Helú, lo que es superior en más del doble a lo que tiene un equipo de futbol en un año que son de 16 a 18 juegos en casa.
Sin embargo, que el beisbol tenga tantos partidos en una temporada puede ser un arma de doble filo debido a que la mayoría son entre semana y en días seguidos, por lo que su afición puede dejar de ir al estadio por falta de tiempo o por el gasto que implica cada visita al estadio. En cambio, los partidos de local en la Liga MX se realizan cada 15 días y casi todos en fin de semana, a menos que se atraviese alguna jornada doble, lo que le permite al aficionado un mayor “descanso” para su bolsillo y mejor planeación para asistir.
En el caso de los Pingos, su promedio de asistencia se mantuvo en 11 mil 761 personas por partido (el más alto de la LMB), que en un aforo de 20 mil 062 lugares, representa al 59 por ciento la capacidad del Harp Helú.
En ese aspecto, en el porcentaje de ocupación, el sitio de honor le corresponde a Cruz Azul que en su segunda etapa en el otrora Estadio Ciudad de los Deportes ha alcanzado un 68 por ciento, mientras que América tiene en este momento un 50, pero con una tendencia muy clara hacia la baja, al igual que Pumas que apenas llega al 36 por ciento de acuerdo con la capacidad de sus estadios.
Futbol, con mayor aforo
Y en ese aspecto, en el aforo de los estadios, es donde el futbol equilibra el número de juegos del beisbol. Por ejemplo, las Águilas el torneo pasado terminaron con 295 mil 136 aficionados con solo ocho partidos en el Azteca, con un promedio superior a los 42 mil seguidores para un inmueble al que le caben más de 80 mil. De seguir en el Coloso de Santa Úrsula, con ese mismo promedio, solo le hubieran bastado cinco juego más para igualar a Diablos, y en los otros tres juegos lo hubiera rebasado por más de 120 mil asistentes.
Ahora, en el Estadio de la Ciudad de los Deportes, su promedio de entradas se ha desplomado hasta en un 61 por ciento, en parte por la reducción lógica del aforo, pero más por el abandono de su público.
También está el ejemplo de Pumas, que después del cierre del Azteca para su remodelación se quedó con el estadio de mayor aforo en la Primera División; al Olímpico Universitario le caben 58 mil aficionados, lo que significa que si Universidad hubiera metido 30 mil personas en cada uno de los 17 juegos que tendrá al final del 2024 (lo que representa el 52 por ciento de su aforo) habría superado la asistencia de los Diablos Rojos.
Misión más difícil Cruz Azul, que prácticamente estaba obligado a llenar cada fin de semana el Estadio Ciudad de los Deportes durante la temporada regular para equilibrar el registro de los Pingos.