La inauguración de México 1968 en papel y tinta, ¿cómo contó La Afición este hecho histórico?

El 10 de octubre de 1964 en el Estadio Nacional de Tokio se dio a conocer que México sería la próxima sede de los Juegos Olímpicos cuatro años más tarde, un hito en la historia de nuestro país que hoy cumple 56 años de haber dado su banderazo de salida en el Estadio Olímpico Universitario de la Ciudad de México.

En las páginas de La Afición, se escribió la historia de aquel 12 de octubre de 1968: la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos fue un espectáculo muy a la mexicana; entre la emoción, música, globos y fiesta, aplausos y gritos el público mexicano que llegó desde antes de las 10 de la mañana al Estadio Olímpico Universitario para ver desfilar a 8 mil atletas de 112 naciones.

El espectáculo dio lugar a uno de los sucesos más importantes de la historia del deporte en México y el mundo pues fue testigo de la primera mujer en encender la antorcha olímpica, Enriqueta Basilio, quien frente a más de 40 mil asistentes y millones de televidentes y radioescuchas, encendió el pebetero del coloso del Pedregal.

A la cita acudieron varias personalidades entre ellos el entonces Presidente de México, Gustavo Díaz Ordaz, quien vio desfilar a las delegaciones.

De fondo se escuchaba la voz de Pierre de Coubertin, fundador de los Juegos Olímpicos Modernos, que decía: “Lo más importante en los Juegos Olímpicos no es ganar sino participar, lo mismo que en la vida lo que más importa no es triunfar sino luchar. Lo verdaderamente esencial no es haber conquistado sino saber luchar para lograrlo”.

“La entrega de la bandera olímpica que trajeron de Tokio, fue entregada por cinco mexicanas vestidas con traje típico de distintas regiones de México, entraron por un extremo al ritmo de la melodía popular japonesa “Sakura” tocada en una marimba, cuando la bandera fue entregada al grupo de japonesas vestidas con el clásico kimono, sonó el inconfundible ritmo de “La Sandunga” la ovación y el calor del público se engrandeció ya que le daba un toque diferente a las ceremonias de inauguración anteriores, en muy acostumbradas al estilo formal europeo, publicó La Afición aquel día.

Sedes principales de los Juegos Olímpicos de 1968

• El Estadio Olímpico Universitario fue la sede principal del evento; tanto para la inauguración como para las pruebas de atletismo.
• Palacio de los Deportes: Instalación construida para los Juegos Olímpicos, en Ciudad deportiva con una capacidad de 25 mil espectadores y 2 mil 500 lámparas que fueron clave para la transmisión de los JO en TV a color.
• Velódromo Olímpico: Destinado a las competencias de ciclismo, construida en madera indeformable traída de África, la pista se construyó sobre una base de concreto recubierto con madera en forma oval.
• Auditorio Nacional: Ubicado en Reforma con capacidad de 14 mil personas fue escenario de las competencias de gimnasia.
• Pista de Remo y Canotaje: Fue construida sobre el canal de Cuemanco en Xochimilco; fue considerada la pista artificial más extensa del mundo con una longitud de 2 mil 200 metros de largo y 225 metros de ancho con capacidad para recibir más de 6 mil espectadores.

• Arena México: Ubicada en el centro del entonces Distrito Federal fue sede de lucha y boxeo.
• Pista de hielo Revolución: Escenario destinado para 26 encuentros de voleibol.
• Teatro de los Insurgentes: Para levantamiento de pesas.
• Campo Marte: Para competencias ecuestres.
• Estadio Azteca con capacidad para más de 100 mil espectadores; Estadio Jalisco para 56 mil espectadores, Estadio León para 35 mil aficionados y Estadio Cuauhtémoc en Puebla con capacidad de 35 mil: Para los encuentros de futbol.
• Subsedes: El puerto de Acapulco a mar abierto para las competencias de vela.
• Club de Golf en Avándaro.

Con información de Archivo Milenio / María Martínez