'Puro perdedor'; Canelo exige que no lo liguen con retadores mediocres tras Golovkin

El Canelo Álvarez se sabe el máximo representante de nuestro país en el boxeo y se presume "en una liga superior" respecto a sus compatriotas, por eso puso claras las cosas sobre su postura de "no pelear contra mexicanos" porque, para él, no hay nadie que merezca pararse en un cuadrilátero frente a él.

En la conferencia posterior a su victoria ante Gennady Golovkin, que se demoró por más de una hora ya que le suturaron el ojo derecho, Saúl Álvarez acusó que "puro pobre diablo" es el que quiere enfrentarlo, señalando puntualmente al mexicoamericano David Benavidez, que en varias ocasiones ha lanzado retos públicos al tapatío.

"Cuando dije que no peleo con mexicanos es porque siento que yo represento a México y no es lo mismo ellos que yo, por eso lo digo y no es arrogancia. A los mejores del mundo me les he pegado un tiro, por favor, cómo voy a pelear con un Benavidez que no ha ganado nada y así los demás perdedores, no me falten al respeto con eso. Siempre dicen que no quiero pelear con X o Y y cuando lo enfrento, le gano", aseguró el Canelo.

"Todo el mundo dice que puede ganarme pero muy poquitos lo han logrado, solo dos han podido", añadió el de Guadalajara, que este sábado ganó por decisión unánime con tarjetas de 116-112 y doble 115-113.

'Que hagan su chingada gana'; Canelo sobre sus posibles retadores

Le preguntaron qué le parecería si todos aquellos que lo quieren retar se enfrentan entre sí para obtener al mejor y que ese pueda encabezar una cartelera con él en un futuro cercano, ya que se recupere de la cirugía de muñeca a la que debe someterse. A esta posibilidad, el Canelo dijo que "le vale madres" lo que hagan todos ellos.

"Que ellos hagan lo que les dé su chingada gana, me vale madres. Yo voy a pelear con quien quiera y ya no más preguntas que estoy un poco molesto", concluyó para despedirse de la prensa.

¿Qué sigue para Canelo?

Una lesión en la muñeca obligará a que Álvarez sea sometido a una cirugía que, de acuerdo a su equipo de trabajo, tiene un tiempo de recuperación entre seis y ocho semanas, pero el propio peleador dijo que se quiere tomar "todo el tiempo necesario" para sanar su cuerpo, estar con su familia y analizar cuál será su próxima pelea, detallando que podría ser hasta septiembre del 2023 o, en el mejor de los casos, para las fiestas del Cinco de Mayo.

"Duele por todos lados (la mano), la sufrí desde la pelea con Caleb Plant pero decía que podía aguantar hasta que me avisaron que necesitaba cirugía y esta noche no la soportaba. No está rota, es un problema de meniscos y del cartílago en la muñeca".