Frances Tiafoe: de ser hijo del conserje a eliminar a Nadal de un Grand Slam

El tenista estadounidense se convirtió en la sensación del US Open tras vencer al español por 6-4, 4-6, 6-4, y 6-3.

Tiafoe celebrando su victoria sobre Nadal en el US Open. (Reuters)

Frances Tiafoe está siendo la sensación del US Open, un torneo donde los estadounidenses apoyan de manera desbordada a los suyos y que ha sido un factor principal para sacar el mejor tenis del que está por debutar en los Cuartos de Final en Nueva York.

De origen humilde, siempre ha llevado la filosofía del trabajo como estandarte, Frances enfrenta el reto más duro de su carrera y es el de llevar la bandera de Estados Unidos lo más lejos posible en el torneo de casa en la modalidad masculina.

La historia de Frances Tiafoe 

La historia del actual 26 del mundo es un ejemplo de que no hay imposibles, su padre, inmigrante de Sierra Leona, era conserje del parque donde entrenaba en Washington, DC., junto a su gemelo Franklin.

Constant Tiafoe y Alphina Kamara Tiafoe, padres de los mellizos, llegaron a Norteamérica buscando algo más que el “sueño americano”, buscaban paz, pues ambos escaparon de África Occidental por la guerra civil que había en su hogar.

Por el trabajo de su padre y también por la condición económica en la que se encontraban, los hermanos Tiafoe literalmente vivían en el Junior Tennis Champions Center, donde dormían juntos en la oficina de mantenimiento mientras su padre laboraba.

Los entrenamientos fueron todo un reto, pues los compañeros de la escuela se burlaban tanto de su color de piel, como de su situación personal donde en ocasiones entrenaban por días consecutivos con las mismas prendas.

Lo llamaban el “niño pobre que se enamoró del deporte de ricos” y lejos de desmotivarle, fue un estimulo que lo hizo seguir creciendo hasta brillar en los torneos regionales y nacionales, pasando posteriormente a los juniors.


Pero las burlas se saciaron una vez que la calidad de Big Foe se mostraba en las canchas, pues se convirtió en uno de los tenistas más jóvenes en ganar el Orange Bowl, uno de los torneos de juniors más prestigiosos del circuito infantil, así como lo logró Bjorn Borg, Ivan Lendl, Roger Federer y Andy Roddick.

Posterior a conseguir el logro en Florida, la raqueta estadounidense expresó que su máximo sueño era convertirse en profesional y ganar el Abierto de Estados Unidos, un sueño que día con día es más factible y que se volvería en otro cuento de hadas en el mundo del tenis.


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