Pese a protestas de las rusas, Israel les gana el Oro en Gimnasia Rítmica
La israelí Linoy Ashram se colgó la Medalla de Oro en Tokio 2020, poniendo un alto al dominio de Rusia y ‘tundiendo’ a las gemelas Averina.
La Gimnasia Rítmica nos regaló una competencia cardiaca y llena de emociones, pues el podio se definió hasta la última participación y con mucha tensión por parte de los jueces; la israelí Linoy Ashram puso alto al dominio ruso y venció contra todo pronóstico a las gemelas Averina.
Las gimnastas tuvieron una última ronda con los listones de infarto, pues muchas tuvieron la oportunidad de subirse al podio olímpico pero un error les costó puntos vitales para subir al podio, tanto así que una de las gemelas Averina no logró medalla.
El puntaje final y las protestas
El All-around de Gimnasia Rítmica fue una prueba larga pero muy entretenida, donde al final la Medalla de Oro se decidió por escasos puntos; Linoy Ashram (Israel) obtuvo el primer lugar con 107,800 puntos, Dina Averina (Comité Olímpico Ruso) quedó segunda con 107,650 puntos y Alina Harnasko (Bielorrusia) quedó tercera con 102,700.
Es importante destacar que el equipo del Comité Olímpico Ruso protestó en cuatro ocasiones el puntaje de las gemelas Averina, pues creían que la puntuación dada por los jueces no era correcta, donde una de ellas sí procedió pero no la más importante.
Al final, luego de la participación de Dina Averina y cuando se confirmó el Oro para Ashram, el Comité Olímpico Ruso volvió a acudir con los jueces pidiendo que se revisara su calificación, esperando que les dieran la Presea Áurea sobre la mesa, algo que no procedió.
Con este hecho se confirmó un ‘fracaso’ para las gimnastas rusas, si es que se le puede llamar así, pues luego de un dominio de un par de décadas, las gemelas Averina vieron cómo se les fue esa marca.
Rusia era amo y señor de la Gimnasia Rítmica
Las gimnastas de Rusia siempre habían ganado la Medalla de Oro desde Atlanta 1996, incluso su dominio se extendía un poco más allá, pues contando a las antiguas representantes de la Unión Soviética, no perdían la Presea Áurea desde 1984, por lo que la Israelí ha hecho historia.
Las gemelas Averina se notaron destrozadas tras ver que no habían conseguido el Oro pero fue todo lo contrario para Linoy Ashram, pues festejó con su equipo y brincó de emoción cuando los jueces la declararon ganadora.