Sudáfrica 2010: El tiki-taka de España elevó a un nuevo campeón en Mundiales

Ya fuera en Eurocopas o Copas del Mundo, España solía presentarse como una selección candidata al título, pero algo sucedía que no podía dar el salto hasta que una generación de jugadores geniales, dirigidos por Luis Aragonés, le dio un giro a la historia en una etapa que marcaría, por igual, el inicio de una revolución en el futbol mundial.

El apodado Sabio del Éxito llegó a ese representativo a mediados de 2004 para edificar un proyecto que lo llevaría a dar el paso que tanto anhelaba, sin importar que en su camino recolectó un nuevo fracaso en Alemania 2006, donde se quedó en Cuartos, y al margen de todas las críticas que eso generó.

Apoyado en jóvenes como Xavi, Iniesta, Casillas, Ramos, Puyol, Fábregas o Villa, por mencionar algunos, le dio un sello inconfundible en el que la posesión de la pelota y los avances rápidos fueron primordiales, además de que les hizo reforzar su autoestima y su calidad, lo que llevaría a la obtención de la Eurocopa de 2008 y dos años más tarde el Mundial de Sudáfrica 2010, un deseo que se les negaba una y otra vez.

Así fue el camino de España

Aunque Aragonés salió del representativo tras el logro europeo de 2008, Vicente del Bosque apareció para darle continuidad al juego y a un estilo que incluso se había reforzado a raíz de los éxitos del Barcelona de Pep Guardiola. Es decir, tácticamente estaban en el pico a nivel mundial en ese entonces, por lo que era momento de poner los conocimientos en práctica.

Sin embargo, en el camino habría traspiés, muy especialmente esa derrota de 1-0 ante Suiza en su debut en el Mundial, el cual revivió todos los temores, ya que el grupo se compactó demasiado con ese resultado, además del buen andar de Chile.

Así, tras vencer 2-0 a Honduras en su segundo partido, tendría que jugársela todo por el todo ante el representativo andino, en un partido de alta tensión en el que supo aguantar todo el sufrimiento para sacar un 2-1 que lo puso en la segunda ronda, incluso como líder con seis puntos.

A partir de entonces ya no habría más empates en su camino, pero sí partidos cerrados que les exprimirían cada gota de sudor, iniciando en Octavos de Final ante la Portugal de Cristiano Ronaldo, encuentro rocoso y de escasas opciones que apenas superaron por 1-0.

Igual de dura sería la fase de Cuartos de Final, en donde todo el ingenio español fue puesto a prueba por la sólida defensa paraguaya, en un partido que sufrieron la falla de un penal por parte de Xabi Alonso y también celebraron un penal atajado por Iker Casillas a Cardozo, hasta que Villa apareció para poner el 1-0.

Ya en la antesala de la Final su oponente sería Alemania, el mismo de la Final de la Eurocopa dos años antes, presentó su mejor futbol para contrarrestar al aristócrata teutón, al cual controló y desquició con sus cientos de toques, lo que haría que el 1-0 final luciera corto ante tan gran demostración.

Y en el duelo por el título sería otra selección revolucionaria, aunque ya alejada de esas glorias de la década de los 70: la preciosa Holanda, tan temible como siempre a pesar de que Cruyff y sus demás leyendas solo eran parte de sus recuerdos.

Sorpresivamente ese sería el partido más crudo en todo el Mundial, ya que lo menos importante fue jugar bien al futbol esa noche en Johannesburgo. España intentó proponer, enseñar su maravilloso futbol, pero el equipo neerlandés destruyó todo hasta que un joven de apellido Iniesta apareció en tiempos extra (116’) para dejar el 1-0 final, el que le dio a su país el primer título del mundo.

Los campeones

Iker Casillas, Raúl Albiol, Gerard Piqué, Carlos Marchena, Carles Puyol, Andrés Iniesta, David Villa, Xavi Hernández, Fernando Torres, Cesc Fábregas, Joan Capdevilla, Vícrtor Valdés, Juan Mata, Xabi Alonso, Sergio Ramos, Sergio Busquets, Álvaro Arbeloa, Pedro Rodríguez, Fernando Llorente, Javi Martínez, David Silva, Jesús Navas y Pepe Reina. DT: Vicente del Bosque.

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