Fair Play Financiero

A una semana de iniciar los Octavos de Final de la UEFA Champions League 2019-2020 se anunció una bomba que sacudió al Manchester City. El equipo inglés sería suspendido por las próximas dos temporadas de la Champions por violar el Fair Play Financiero.

El Fair Play Financiero lo instituyó la UEFA en 2009 con el objetivo de que los clubes tuvieran finanzas sanas y con ello que operaran sin pérdidas mayúsculas. Estas medidas fomentan, entre otras cosas, la formación de juveniles y que los clubes pongan mayor atención a su balanza de resultados (ingresos vs egresos).

Como lo he comentado varias veces en el podcast de Deportes Inc, los ingresos más importantes en los clubes vienen de los derechos de televisión, seguido de patrocinadores, premios, venta jugadores y de boletos, entre otros. Por otro lado, los egresos más fuertes están en los sueldos de los jugadores.

Donde existe un “área gris” en este Fair Play Financiero es con los patrocinadores. Es precisamente en este rubro donde el Manchester City se pasó de inteligente. Mientras que la UEFA si permite que los dueños de los clubes inyecten dinero (patrocinen) a través de empresas de las que son dueños, si estos ingresos representan más del 30% de los ingresos totales del club, entonces la UEFA procederá a realizar una investigación para determinar si el patrocinio va de la mano con los precios del mercado.

Específicamente, el dueño del City, Sheikh Mansour, es parte de la familia que reina Abu Dhabi, quien a su vez controla la aerolínea Etihad de donde venía el patrocinio por más de 67 millones de libras esterlinas anuales. Una serie de correos electrónicos filtrados por un periódico alemán parecen fortalecer el caso de la UEFA contra el City. Será en los tribunales donde el Manchester City tendrá que defenderse con una serie de apelaciones para poder competir en las temporadas 2020-2021 y 2021-2022 en la máxima competición de clubes.

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