La estrella del Real Madrid, Vinícius Junior, está bajo la lupa de las diferentes marcas deportivas destacadas, debido a su interés en romper su contrato con Nike por un desacuerdo que surgió con la marca.
El origen de esta polémica empezó durante el Mundial de Qatar 2022, cuando Vinícius pidió a sus representantes buscar la mejor forma para romper su contrato firmado con Nike, que concluía en el 2028. No solamente fue esta solicitud “inesperada” del jugador, sino también su actitud con el paso del tiempo al usar unos tacos negros de modelos antiguo de la marca, durante un partido de la Liga Santander, siendo de esta forma un acto de “berrinche” que generó mucha molestia dentro de la estructura de la gran firma deportiva.
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Aunque no hay ninguna declaración directa de Vinícius sobre las razones de este rompimiento, se cree que probablemente es por supuestos malos tratos que ha recibido. Después de todo este ambiente turbio entre el jugador y la marca, Adidas y Puma, entre otras, mostraron algún interés sin concretar una oferta monetaria hasta el momento; sin embargo, muchos piensan que Vinícius puede repetir lo que ha hecho Neymar, quién firmó un contrato con Puma el año 2020 por, nada más y nada menos, que 25 millones de euros al año.
Aquí hay un factor poco perceptible detrás de todo esto, pensando en lo que puede influir la política y la geopolítica en las decisiones comerciales de las marcas deportiva. No es una locura mencionarlo, de hecho les tengo aquí diversos ejemplos de la forma cómo las marcas pueden ser manejables a gran escala por potencias políticas por un lado, y como otras marcas pueden sufrir daños por no alinear factores geopolíticos.
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Nada en la actualidad es poco probable, la economía mundial aparentemente está a punto de entrar en una nueva crisis, después de que dos bancos en Estados Unidos de América quedaron en bancarrota arrepentinamente, y detrás de esto está la geopolítica internacional intentando compensar, aprovechar o simplemente cuidar sus intereses.
La geopolítica siempre ha tenido su influencia en las marcas comerciales, mientras más grande es la marca más robusto es su sistema y más vulnerable es a los factores geopolíticos. La marca H&M puede ser un ejemplo. A saber: la marca tomó la decisión de ya no usar algodón que proviene de China, después de los supuestos malos tratos que reciben los trabajadores en el cultivo de este algodón.
Tras esa decisión, la marca está sufriendo serios daños en su presencia en China, incluso en el ámbito digital. Otra marca que se puede abordar es MC Donald´s y lo que pasó con la guerra entre Rusia y Ucrania: ¿Qué tiene que ver una marca de restaurantes con las decisiones políticas?
Si conectamos los temas anteriormente mencionados, el poder del patrocinador sobre el jugador y el poder político sobre el patrocinador, ¿podría la geopolítica influir en los deportistas controlando sus patrocinadores de marcas comerciales? Evidentemente, sí. Las cosas existen aunque no se observan tanto.
Aboud Onji. Comunicólogo e Ingeniero. Maestro en Dirección de Comunicación, Maestro en Sustentabilidad Energética, Miembro de la Asociación Española de Directivos de Comunicación DIRCOM. Experto en política internacional y de Medio Oriente.
Twitter: @aboudonji
Página web: https://www.aboudonji.com/