FMF: La reconstrucción

La designación de Juan Carlos Rodríguez como presidente electo de la Federación Mexicana de Futbol (lo que dará paso a su posterior toma de cargo como Comisionado Ejecutivo del Futbol Mexicano), no es otra cosa más que el reposicionamiento de Televisa en el centro de la toma de decisiones.

Tal cual como en la foto oficial de la Asamblea de Dueños, en el centro se coloca el grupo televisivo, que con la llegada de "la Bomba" Rodríguez y su misión de crear la Comisión Ejecutiva del Futbol Mexicano, manda un mensaje contundente y, con éste, anuncia su visión de hacia dónde debe ir la industria de la que forman parte. Pero no como uno más.

Será el próximo Comisionado del futbol mexicano quien, por encargo de los dueños (o respaldados por ellos), nombrará al presidente de la FMF "oficial", ratificado en su momento por una Asamblea General, que antes de seis meses deberá ser convocada y celebrada, así lo establecen los Estatutos de la FMF.

En ese sentido, la designación de Rodríguez debe entenderse como transitoria y un medio que como primer objetivo facilitó la expedita salida de Yon de Luisa y como segundo que el organismo rector del futbol nacional siga operando, a la vez que se ponen en marcha los instrumentos de su reestructuración, con un sentido comercial, en mayor grado.

La otrora separación operativa que se llegó a visualizar entre la FMF y la Liga MX se acabó; ya no habrá tal. Todo quedará supeditado al Comisionado Ejecutivo del Futbol Mexicano y, con ello, se alinearán visión y misión a una sola voz. Visto así, la Liga MX reduce su margen de acción, si es que alguna vez lo tuvo a plenitud.

La Liga MX, la dirección de selecciones nacionales, la presidencia de la FMF y el resto de las estructuras que dependen de ésta quedarán supeditadas a la Comisión; es decir, a "la Bomba" Rodríguez, al grupo del cual proviene, avalado por el resto de los dueños, que a su vez creen en la utilidad de erigir esta figura que afronte el impase que desató Qatar 2022.

¿Cuál será el resultado? No lo sabemos. De lo que podemos estar seguros es que el objetivo esencialmente es cuidar el negocio y poner en sintonía todas las herramientas y recursos posibles para obtener el máximo beneficio de una propiedad tan valiosa para quienes invierten y tan preciada para quienes lo consumen: el inagotable futbol.