La revolución de Ohtani en Los Angeles

La ciudad de Los Angeles está llena de estrellas, pero de la que más se ha hablado este año es de una japonesa. Desde que se supo que este otoño Shohei Ohtani sería agente libre, fueron meses de espera y de ver olas de fanatismo con la esperanza de miles de aficionados de que el talento de 29 años se decantara por su novena predilecta.

Proveniente de una cultura que prefiere atenerse a resultados y mantener un bajo perfil, desde el momento en que lo llamaron la encarnación moderna de Babe Ruth, su fama estaba condenada. Llegó a las Grandes Ligas hace seis temporadas con Los Angeles Angels y ahora ha decidido moverse de barrio a Elysian Park, donde yace el Dodger Stadium.

Si bien el fichaje deportivo del año fue el de Messi al Inter de Miami, por lo que mueve el astro argentino y el futbol a nivel global, sin duda el de Ohtani rompe todo los récords monetarios. Con 700 millones de dólares por 10 años, estamos ante el contrato más lucrativo de la historia del deporte. Si bien el propio jugador propuso que 680 millones serán diferidos, es decir cobrará 2 mdd por temporada y el resto se le pagará entre 2034 y 2043, lo que le abre las puertas a su nuevo equipo a seguir fichando estrellas los próximos años.

Al fin y al cabo estamos hablando de la novena que tuvo a Jackie Robinson y a Fernando Valenzuela, pero ¿cómo van a recuperar su inversión los Dodgers? De más venta de boletos no saldrá, ya han liderado la asistencia a su estadio en 10 de las últimas 11 temporadas y las ventas de jerseys, gorras y todo lo que generan fuera de su mercado lo deben compartir con el resto de franquicias de la liga.

La respuesta es solo con la conquista de una nueva Serie Mundial, o varias. Si bien han estado presentes en los playoffs durante las últimas 11 temporadas, solo han ganado el título en 2020. Ahora tienen al ganador del MVP de la Americana en dos ocasiones, un dos en uno como bateador y pitcher, que te puede pegar un home run a 100 pies de altura y lanzar una pelota a 500 millas por hora. Inicia una nueva era del Shotime y la ciudad de Los Angeles está lista.

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