El principio del fin de temporada

Estamos a 50 días o 10 torneos de que termine la temporada 2023 del tour de la ATP. Si bien tras las Nitto ATP Finals en noviembre, aún habrá tenis con las Finales de la Copa Davis y las NextGen ATP Finals, la realidad es que solo nos quedan tres grandes eventos claves por disfrutar. El Masters 1000 de Shanghái, el Masters de París y las Finales con los ocho mejores del mundo en singles y dobles.

La sensación es que tras el US Open, el último Grand Slam del año, el circuito pierde el interés de la afición con la llegada de la gira asiática, sin embargo, octubre en el calendario resulta ser el clímax en la carrera por un boleto en las Finales de Turín, y en donde cada punto en el ranking cuenta en el duelo por cerrar el año como No. 1 del mundo.

Este 2023, Carlitos Alcaraz hace su debut en Shanghái después de que el torneo atravesó una pausa por pandemia y no se disputaba desde 2019. Novak Djokovic, actual líder del ranking, se bajó del cartel a pesar de que se sospechaba que en este cierre de temporada solo disputaría los 1000 y las Finales. Daniil Medvedev, el último campeón en China, pasó a ser el segundo sembrado, seguido de Holger Rune que no ha dejado buenas sensaciones en Pekín tras su regreso por lesión, mientras que Stefanos Tsitsipas se ha complicado su lugar en Turín tras tampoco encontrar ritmo en Beijing.

Los que sí parecen estar cumpliendo con la tarea, es decir con la presión y responsabilidad de lo que es estar en un alto nivel para el desenlace del año, son Jannik Sinner, Andrey Rublev y Alexander Zverev. A estos ocho jugadores, agreguemos los nombres de Taylor Fritz y Casper Ruud en la lucha por un puesto entre los mejores ocho de la temporada y es así como de este recipiente de tenistas y sus altibajos a lo largo del año, podemos sacar las conclusiones de lo que ha significado el 2023 para el deporte blanco.