Llegamos a la mitad de la temporada regular, por lo que es momento de hacer una introspección a lo que nos han brindado estas 8 semanas de competencia.
Hace 4 semanas nos preguntábamos si los 49ers iban a mantener esa tendencia ascendente, basada en una gran defensiva y una ofensiva creativa cimentada en el juego terrestre. Su récord de 7-0, sumado a un Jimmy Garoppolo que tal vez no brille, pero que es extremadamente eficiente, hacen suspirar con esperanza a la Niner Nation.
Los Patriots, por su parte, siguen con la defensiva más dominante de la NFL y parece que eso nos está permitiendo ver una faceta de Bill Belichick que conocemos a cuentagotas…su sonrisa. No es para menos, ya que tras su victoria de la semana 8, Belichick se unió a la muy selecta lista de entrenadores con 300 o más triunfos, confirmándose como uno de los mejores en la historia. Solo el tiempo dirá si al término de su carrera, supera a Don Shula como el coach con más partidos ganados en la NFL.
Hace un mes, el candidato número 1 a jugador más valioso, era sin duda, Rusell Wilson. Pero la NFL es cambiante y un mes después, Aaron Rodgers, de quién se decía su defensiva lo había cargado al inicio, demuestra que está de vuelta y más fuerte que nunca, fortaleciendo su candidatura para ser el MVP de la temporada.
Hablando de candidatos a MVP, si bien Patrick Mahomes no pudo jugar contra Green Bay tras dislocarse la rotula de la rodilla derecha, también lo es que cuando hablamos de él, nos estamos refiriendo a un súper humano, ya que tras solo dos semanas de recuperación por la mencionada lesión, se espera esté de vuelta para la semana 9.
Ya para cerrar, la carrera por ser el peor equipo de la temporada tiene ya en la pista a dos caballos, Miami y Cincinnati. Los Bengals claramente están pensando en el 2020, al anunciar que Andy Dalton irá a la banca. El otro caballo en esta competencia, los Dolphins, parecían haber mostrado que no quieren terminar siendo el peor equipo en la historia de la NFL, por lo que salieron con todo ante Pittsburgh, al grado de estar arriba 14-0 ante los Acereros en Heinz Field. No obstante, fieles a su filosofía de tirar todo por la borda este año, decidieron llamar un blitz con 8 jugadores en 3 &20, además de mandarle doble cobertura a uno de los 3 receptores que tenía Pittsburgh en el campo. El resultado, como era de esperarse, fue un pase al receptor, que por matemática pura quedaba solo y un touchdown que se tradujo en una cascada de 24 puntos sin respuesta, confirmando a los Dolphins, aún, como serios candidatos al peor equipo del año.
Comienzan los últimos dos meses de temporada regular, noviembre y diciembre, donde dicen…se forjan los campeones ¿Veremos algún cambio drástico en los standings o se mantendrán los favoritos como tal?